China no registra ninguna muerte por primera vez desde enero

Japón declara el estado de emergencia
Trabajadores de la automoción de Wuhan vuelven a la actividad. EFE
photo_camera Trabajadores de la automoción de Wuhan vuelven a la actividad. EFE

La Comisión Nacional de Sanidad de China informó este martes de que no se certificaron nuevas muertes por la neumonía Covid-19 en su territorio durante el lunes, cuando los casos graves de infectados por el coronavirus SARS-CoV-2 se redujeron hasta los 211, la cifra más baja desde enero.

Durante las últimas semanas la cifra oficial de muertos por covid-19 se ha mantenido constante por debajo de la decena, y la mayoría de los decesos se han producido en la cuna de la pandemia, la ciudad de Wuhan, donde ahora quedan, según la fuente, 181 de los mencionados 211 pacientes infectados en estado grave.

Además, las autoridades sanitarias chinas indicaron que, hasta la pasada madrugada local (16.00 hora GMT del lunes), se diagnosticaron 32 nuevos casos, todos ellos provenientes del extranjero, frente a los 39 (38 de ellos "importados") registrados en la víspera.

JAPÓN. El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, declaró este martes formalmente la alerta sanitaria en varias regiones del país, una medida que amplía de forma excepcional los poderes de las autoridades con el objetivo de contener la propagación del covid-19.

Abe anunció la activación de esta medida conocida en Japón como estado de emergencia durante una reunión mantenida en Tokio con un grupo gubernamental especialmente designado para gestionar la crisis sanitaria, y tras obtener el respaldo del parlamento nipón.

La alerta sanitaria ha comenzado a regir este mismo martes en el Área Metropolitana de Tokio y otras seis prefecturas del país, se prolongará hasta el 6 de mayo y permitirá a las autoridades imponer una serie de restricciones a ciudadanos y empresas para tratar de frenar el aumento de los contagios.

En concreto, Abe pidió a los ciudadanos que eviten salir de casa dentro de lo posible hasta que termine el estado de alerta con el objetivo de "proteger la vida y la salud del pueblo japonés", durante su intervención en la reunión, recogida por la televisión local.