Turquía y Siria intentan salvar vidas entre las ruinas del seísmo, que ha causado ya 7.200 muertes

Las autoridades locales tienen la ayuda de 70 estados y 14 organismos, en una operación de rescate formada por 50.000 personas ► El último recuento computa 35.600 heridos mientras se teme que pueda haber todavía mucha gente atrapada ► Atsu, exjugador del Málaga, rescatado con vida

Personal de emergencias busca supervivientes entre los escombros de un edificio de Diyarbakir, en el sur de Turquía. REFIK TEKIN (EFE)
photo_camera Personal de emergencias busca supervivientes entre los escombros de un edificio de Diyarbakir, en el sur de Turquía. REFIK TEKIN (EFE)

Turquía y Siria luchan contra el reloj para salvar el mayor número de vidas posible tras el terremoto del lunes, que ha provocado ya más de 7.200 muertos y más de 35.600 heridos. Así, las labores de rescate continúan con el temor de que haya aún cientos o miles de personas atrapadas bajo los escombros. Para ello, los países afectados, cuentan con una destacada ayuda internacional, que este martes ya trabajaba en las zonas afectadas. 

El propio presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, agradeció esta ayuda material y humana enviada, según sus datos, por 70 estados y 14 organismos internacionales en una operación de rescate conformada por unas 50.000 personas, que incluye la presencia de 2.700 especialistas en rescate procedentes de 65 países que han llegado ya o van de camino a las zonas más afectadas. El dispositivo cuenta con más de cien aviones y helicópteros desplegados. 

En Turquía, donde tuvieron su epicentro los temblores de magnitud 7,8 y 7,6, el recuento oficial habla ya de 5.434 muertos y 31.777 heridos, según comunicó Afad, la agencia de emergencias turca. 

Ante esta catástrofe, el Gobierno turco del presidente Recep Tayyip Erdogan declaró tres meses de estado de emergencia en las diez provincias afectadas. El jefe del Estado asegura que estos terremotos suponen el mayor desastre sufrido por el país desde el seísmo de 1939 en Erzincan, en el este de Turquía, que dejó más de 32.000 muertos. 

Hasta el momento, se han contabilizado 435 réplicas de menor intensidad en las zonas afectadas. Asimismo, el seísmo dejó un total de 5.775 edificios derruidos

El seísmo agudiza la crisis humanitaria en Siria

En Siria, inmersa en una guerra civil desde hace doce años, la información sobre víctimas proviene, por un lado, del Gobierno de Bachar al Asad y, por otro, del último enclave del país controlado por la oposición. El recuento total señala que en este país han muerto 1.832 personas y otras 3.849 han resultado heridas. 

Los Cascos Blancos, un grupo de rescatistas que opera en las áreas en manos de la oposición, alertó este martes de que "se está agotando el tiempo" y recordó que "cientos" de personas continúan atrapadas. "Cada segundo puede salvar una vida, llamamos a todas las organizaciones humanitarias y organismos internacionales a que proporcionen apoyo material y ayuda", urgieron. 

Las bajas temperaturas y la nieve en la zona, donde también hay territorios montañosos de difícil acceso, complican las tareas de rescate. 

Ya antes de los seísmos que tuvieron lugar el pasado lunes, Siria sufría su peor crisis humanitaria desde el estallido de las revueltas contra Damasco en 2011 y el posterior inicio de la guerra, con el 90% de la población sumida en la pobreza, desabastecimientos de productos básicos y millones de personas desplazadas. 

Límite para el rescate: siete días

Después de un terremoto solo hay una ventana de siete días para rescatar a las personas que quedan sepultadas bajo los escombros, dijo este martes un representante de la Oficina de Ayuda Humanitaria de la Onu, la primera que actúa en casos de desastre. 

Esta estimación es resultado de innumerables operaciones de rescate en el mundo, aunque siempre puede haber excepciones y que las víctimas soporten un poco más de tiempo, comentó el portavoz de esa entidad, Jens Laerke, al hacer un primer balance del coste humano de la tragedia sucedida en Turquía y Siria este lunes. 

Para rescatar a las víctimas, la Ono ha movilizado sendos equipos de evaluación de desastres, así como de búsqueda y rescate, compuestos por los mejores especialistas del mundo en estas tareas, los que están viajando a Turquía. 

"El gran reto ahora mismo es el acceso por tierra (de este personal y sus equipos) ya que muchas carreteras de la región han quedado destruidas por los terremotos", comentó Laerke. Otra dificultad es la falta de vehículos para transportar a los expertos internacionales, ante lo cual las autoridades locales están movilizando camiones desde otras provincias de Turquía. 

Atsu, exjugador del Málaga, rescatado con vida

El exjugador del Málaga e internacional ghanés Christian Atsu ha sido rescatado este martes con vida de entre los restos del edificio donde quedó atrapado, según informó el equipo donde juega, el Hatayspor.

Atsu, con el Málaga. ARCHIVO
Atsu, con el Málaga. ARCHIVO

"Christian Atsu ha sido rescatado con heridas. Nuestro director deportivo, Taner Savut, sigue desgraciadamente bajo los escombros", anunció esta mañana un portavoz del Hatayspor a la emisora Radio Gol.

El club no ha dado más datos sobre su estado de salud. La ciudad de Hatay está a unos 180 kilómetros al sur de la provincia donde tuvo su epicentro el terremoto de magnitud 7,6 que asoló el sureste de Turquía, provocando al menos 2.900 muertos en Turquía y otros 1.500 en la vecina Siria.

El delantero, de 31 años, ha militado también en el Oporto, el Chelsea o el Newcastle, entre otros clubes.

Arduas labores de rescate en Turquía

En la mañana de este martes se han empezado a conocer casos concretos de supervivientes, como el de un hombre de 30 años que fue sacado con vida de entre los escombros de un edificio, casi 30 horas después de que comenzaran los temblores, o el de una madre y sus tres hijos, que fueron localizados con vida tras 28 horas atrapados.

Según Afad, unas 25.000 personas, entre los que se cuentan soldados, participan en las labores de rescate, mientras que el Gobierno turco ha destinado 12,1 millones de euros (13,3 millones de dólares) en fondos urgentes para las diez provincias más afectadas.

Además, docenas de países han comenzado ya a enviar a cientos de rescatistas y expertos en búsqueda de supervivientes. En el caso de España, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha informado de que los buques españoles de la Armada Juan Carlos I y Galicia han partido este lunes en dirección a la zona afectada por el terremoto en Turquía para ayudar en las labores de rescate de personas, además de dos aviones que salieron hacia la ciudad turca de Adana, donde se encuentra la base militar española.

Más de 350.000 víctimas alojadas

El vicepresidente de Turquía, Fuat Otkay indicó que más de 350.000 víctimas de los seísmos han sido alojadas en centros universitarios, refugios y residencias de estudiantes.

También se está evacuando en avión a heridos graves a centros médicos de Estambul y Ankara, y diez barcos están trasladado también a víctimas desde el puerto de Iskenderún, al sureste de donde se registró el epicentro, hasta otras zonas.

A la población de las zonas afectadas, donde viven 15 millones de personas, se le ha indicado que no entre en sus domicilios, por lo que miles de personas se han visto obligadas a pasar la noche en coches o a la intemperie.

Las bajas temperaturas y la nieve en la zona, donde también hay territorios montañosos de difícil acceso, complican las tareas de rescate.

Las autoridades locales han informado de cortes en el suministro de gas y electricidad en algunas zonas, y la empresa estatal de petróleo ha cortado el suministro de crudo hacia la región como "medida de precaución".

Un grupo de personas se calienta frente a un fuego en Hatay, Turquía. ERDEM SAHIN (EFE)
Un grupo de personas se calienta frente a un fuego en Hatay, Turquía. ERDEM SAHIN (EFE)

Cerca de 150 temblores

El primer gran terremoto se registró a la 4.17 horas (01.17 GMT) y tuvo una magnitud de 7,7, según Afad, con epicentro en Pazarcik en la provincia turca de Kahramanmaras.

Posteriormente se produjeron hasta 145 temblores más, uno de ellos de magnitud 7,6 a las 10.24 GMT.

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que ha declarado siete días de duelo nacional, advirtió ya el lunes que debido a que continúan las labores de desescombro en muchos edificios de la zona del terremoto era difícil saber a cuánto ascenderá el número de muertos y heridos.