Un brasileño de 35 años con antecedentes, así es el autor del atentado frustrado a Cristina Fernández

Tiene antecedentes penales y lleva tatuajes con referencias nazis
Fernando Andrés Sabag Montiel. REDES SOCIALES
photo_camera Fernando Andrés Sabag Montiel. REDES SOCIALES

Argentina vive conmocionada por el intento de magnicidio a la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, la cara del poder en el país en los últimos tres lustros y cuyo procesamiento judicial por supuesta corrupción ha polarizado a una sociedad argentina ya muy dividida de por sí.

El atentando contra Fernández se produjo poco después de las nueve de la noche (hora local) cuando un hombre de nacionalidad brasileña y de 35 años, Fernando Andrés Sabag Montiel, intentó disparar en la cabeza a la vicepresidenta argentina. El atacante llegó a apretar el gatillo, pero la bala (había cinco) no llegó a salir. Cristina Fernández, en un gesto reflejo, se agachó en medio de sus escoltas, que detuvieron al agresor.

El atentado frustrado se produjo en medio de la vigilia permanente de seguidores kirchneristas que, desde el 22 de agosto, cuando un fiscal pidió para ella 12 años de prisión por una acusación de corrupción, se instaló junto al domicilio de la exmandataria. En la zona se manifiestan también opositores a la política, lo que elevó mucho la tensión en los últimos días.
 

El agresor, que se camufló entre los simpatizantes, tiene antecedentes penales y lleva tatuajes con referencias nazis. Según el diario La Nación, en sus redes sociales, ya cerradas, seguía perfiles ligados a grupos radicalizados y de odio, así como páginas de órdenes masónicas, de comunismo satánico o de ciencias ocultas.

El diario Clarín asegura que el detenido lleva varios tatuajes, algunos alusivos a las mitologías vikingas y germánicas, incluido uno en el hombro que representa un Schwarze Sonne, un sol negro, símbolo ligado a la filosofía ocultista del nazismo y utilizado por las SS de Adolf Hitler.
 

Nada más conocerse la noticia, el presidente argentino, Alberto Fernández, que tiene grandes diferencias con su vicepresidenta, anunció una comparecencia en cadena nacional, en la que decretó feriado (festivo) el día de ayer para que los ciudadanos pudiesen mostrar su rechazo al intento de magnicidio y dijo que "este atentado merece el más enérgico repudio de toda la sociedad argentina, de todos los sectores políticos, porque estos hechos afectan nuestra democracia".

Fernández explicó que la vicepresidenta "permanece con vida porque, por una razón todavía no confirmada técnicamente el arma, que contaba con cinco balas, no se disparó pese a haber sido gatillada".

TREGUA. El atentado hizo posible una frágil tregua en la polarizada política argentina. De hecho, dirigentes de la principal coalición de oposición política en Argentina repudiaron el ataque a la vicepresidenta del país.

"Mi repudio absoluto al ataque sufrido por Cristina Kirchner (sic) que afortunadamente no ha tenido consecuencias para la vicepresidenta", dijo el expresidente Mauricio Macri (2015-2019).

Macri, miembro de Propuesta Republicana (Pro), una de las fuerzas del frente opositor Juntos por el Cambio, señaló en la red social Twitter que "este gravísimo hecho exige un inmediato y profundo esclarecimiento por parte de la Justicia y las fuerzas de seguridad".

Pese a ello, hubo quien mantuvo la línea de confrontación, como Patricia Bullrich, representante del ala más dura del macrismo. "El presidente está jugando con fuego: en vez de investigar seriamente un hecho de gravedad, acusa a la oposición y a la prensa, y decreta un feriado para movilizar militantes. Convierte un acto de violencia individual en una jugada política. Lamentable", expresó la exministra de Seguridad y actual presidenta del Pro.

NUMEROSAS MANIFESTACIONES CONTRA EL ATENTADO

El intento de asesinato fue contestado en las calles de Buenos Aires con numerosas manifestaciones, aprovechando la declaración de día no laborable.

Organizaciones sociales, sindicales y políticas afines al oficialismo y ciudadanos marchaban anoche por diversos sectores de la capital para concentrarse en la Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada, sede del Ejecutivo argentino.

Además, las condenas internacionales se sucedieron. En España, miembros del Gobierno y partidos de izquierda mostraron su consternación por el intento de asesinato de la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, advirtiendo de los efectos de los discursos de odio y crispación, mientras que el principal partido de la oposición, el PP, guardó silencio.

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