Ban Ki-moon trata de resucitar las negociaciones en Kenia

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Las negociaciones en Kenia entre el Gobierno y la oposición se han suspendido el jueves, tras la muerte a tiros de un legislador del Movimiento Democrático Naranja (ODM). En un intento por reanudarlas, y para hacer un llamamiento al cese "inmediato" de la violencia, ha visitado el país el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.

Ban Ki-moon responsabilizó a los líderes políticos de la crisis, mientras el presidente de Kenia, Mwai Kibaki, cargó una vez más contra la oposición para culparla de la ola de violencia que vive el país. Insistió en que su reelección, que motivó las violentas protestas de los partidarios del líder opositor, Raila Odinga, "contó con el apoyo de la mayoría de los kenianos".

"La violencia tiene que cesar inmediatamente, porque es intolerable e inaceptable en el siglo XXI", afirmó Ban en una rueda de prensa que ofreció en esta capital, donde llegó hoy para apoyar los esfuerzos de mediación entre el Gobierno y la oposición.

En plena cumbre africana
"Los líderes políticos tienen el deber y la responsabilidad de resolver esta situación". El secretario general de la ONU llegó a Nairobi procedente de Adis Abeba, donde participó en la cumbre africana que se abrió el jueves y que concluirá mañana, sábado.

Su visita tienen como propósito apoyar los esfuerzos de mediación entre el Gobierno y la oposición de Kenia que encabeza el ex secretario general de la ONU Kofi Annan, con el fin de poner fin a la peor crisis que atraviesa Kenia en toda su historia.

La crisis estalló a raíz de las elecciones del 27 de diciembre pasado. El presidente Mwai Kibaki, en el poder desde 2002, fue reelegido en esa votación, pero la oposición asegura que fue gracias a un millón de votos fraudulentos. Observadores electorales internacionales dudan también de la pureza del escrutinio por las irregularidades detectadas.

Las protestas políticas y las luchas tribales que se han registrado desde entonces han causado unos 900 muertos y más de 250.000 desplazados internos, según datos oficiales.

Mediación de la ONU
Ban ofreció su rueda de prensa después de reunirse con los representantes del Gobierno y de la oposición que están reunidos desde el jueves para buscar una salida a la crisis, bajo la mediación del equipo encabezado por Annan.

El secretario general de la ONU se reunió en Adis Abeba con el presidente Kibaki y se entrevistó en Nairobi con el líder de la oposición, Raila Odinga, que reclama su triunfo en las elecciones del 27 de diciembre y no reconoce a Kibaki como jefe de Estado. A este respecto, Ban Ki-moon ha señalado que "Naciones Unidas no tiene que reconocer o dejar de reconocer la legitimidad de un Gobierno".

Por su parte, el presidente de la comisión de la Unión Africana, Alpha Konare, le dijo a los dirigentes africanos que asisten a la citada cumbre que no se pueden quedar con los brazos cruzados. "Si Kenia se quema no habrá nada mañana. Kenia es un país que representa una esperanza para el continente", afirmó.

"Si vemos a Kenia hoy, vemos violencia en las calles , estamos hablando incluso de limpieza étnica y de genocidio. No podemos quedarnos sentados sin hacer nada", añadió.

La cumbre de Unión Africana abordará seguidamente el tema de la industrialización de África, y la crisis en Kenia pasará posiblemente a un segundo plano. Cualquier avance sobre la crisis dependería únicamente de los esfuerzos de mediación en Nairobi.

Violaciones, arma de guerra
En el ámbito de los derechos humanos, las violaciones y otros abusos sexuales contra las mujeres van en aumento y "son utilizadas como arma de guerra, para intimidad y amenazar", denunció la ONU. La Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) ha difundido un informe parcial basado en los casos de violaciones que se trataron en el Hospital de Mujeres de Nairobi, en su Centro de recuperación de la violencia de género.

Según los datos, en el periodo comprendido entre las elecciones del 27 de diciembre y el 20 de enero, se recibieron 152 casos en ese hospital. El más joven de los supervivientes de ese tipo de violencia fue un bebé de 1 año, y la mayor, una mujer de 58 años. Del total de casos tratados, 140 eran mujeres y 12 varones. 89 de las víctimas eran mayores de 18 años, y 63 menores de esa edad.

En el documento se narran algunos casos que dan idea del tipo de violencia que se ha desatado contra las mujeres y algunos niños desde que comenzó la crisis. Numerosas mujeres denunciaron haber sido violadas por grupos de hombres seguidores de algunas partes políticas en conflicto.

Además, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de los Asuntos de Emergencia (OCHA) aseguró que hay 290.000 desplazados internos en Kenia y alertó sobre las dificultades para distribuir la ayuda humanitaria a causa de la violencia que arrasa el país desde hace un mes.

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