La multinacional de origen vasco Idom es la empresa propuesta por la Xunta para elaborar el proyecto básico y de ejecución de la nueva estación de autobuses de Lugo, dentro del futuro complejo intermodal del barrio de A Estación. Idom es una firma con experiencia en este tipo de proyectos puesto que ya participó en la realización de estudios para las estaciones intermodales de Ferrol, A Coruña y Santiago.
La Xunta sacó a concurso este proyecto por casi 195.000 euros y un plazo de ejecución de once meses y la oferta de Idom fue la que obtuvo mejor puntuación, de las cuatro que se presentaron. Compitieron con la multinacional las UTEs Iglesias Veiga-Vázquez, Muíño-Martínez Segovia; Ingeniería del Noroeste-CCD 89 Arquitectura y Temha SL-Vier Arquitectos.
La construcción de la intermodal requiere, paralelamente, algunos cambios en la normativa urbanística de la zona
SIN ADJUDICAR. La Xunta no adjudicó aún oficialmente este trabajo, que estará financiado al 80% con fondos europeos y que se llevará a cabo de forma paralela al diseño del espacio que dejará libre la actual estación. La administración autonómica convocó otro concurso público para este proyecto al que concurren diez empresas y que todavía no fue resuelto porque se requirió más documentación a alguno de los licitadores.
La estación de autobuses se hará al lado de la nueva terminal ferroviaria que construirá Adif y encima del párking que dará servicio al complejo intermodal y que también ejecutará el administrador ferroviario, aunque la Xunta y el Gobierno central todavía no tienen cerrada la fórmula de financiación de esta parte de la obra. Esta circunstancia fue el último motivo de conflicto entre ambas administraciones, que en este momento están trabajando en el borrador del convenio de colaboración. La Xunta pide que se replique el firmado en otras ciudades gallegas, aunque en cada una de ellas el proyecto de intermodalidad tiene sus particularidades.
La construcción de la intermodal requiere, paralelamente, algunos cambios en la normativa urbanística de la zona y Xunta y Concello habían mostrado su disposición a colaborar para agilizar los cambios necesarios.
