Veinticinco lucenses están en lista de espera por un órgano: la mayoría, por un riñón

La donación en el Hula se está recuperando y, en lo que va de año, ya se han producido 4, frente a las 5 en total de 2022
La coordinadora de trasplantes del Hula, Montserrat Ortiz. SEBAS SENANDE
photo_camera La coordinadora de trasplantes del Hula, Montserrat Ortiz. SEBAS SENANDE

Un total de 25 lucenses están en lista de espera para recibir un órgano; la mayoría, un riñón. En el conjunto de Galicia son más de 250 las personas que se encuentran en esa circunstancia, dos terceras partes aguardando un trasplante renal.

Este año la donación en el Hula parece estar recuperándose del descenso sustancial sufrido el pasado, cuando solo se produjeron 5 donaciones frente a la decena de media que se tuvieron en años previos. "En 2021 hubo 11 donaciones. En todos los hospitales de España se percibieron los efectos de la pandemia, pero no aquí", explica la coordinadora de trasplantes del Hula, la intensivista Montserrat Ortiz, que forma equipo con sus compañeros de Uci Miguel Ángel Fernández y Diego Pastor.

La bajada en 2022 en Lugo se debió, según explica, a que hubo pocos candidatos, menos pacientes con muerte cerebral, que suponen habitualmente el grueso de los donantes. Además, no se produjo ninguna donación en asistolia, también llamada a corazón parado, que es la de los pacientes fallecidos por el cese de la actividad cardíaca y la que más está creciendo en el conjunto de la comunidad. En Galicia, hubo 47 donaciones en 2022 de estas características, un 74% más que el año anterior.

La intensivista atribuye el descenso en el número de donaciones en el área sanitaria lucense únicamente a esa falta de candidatos y no a las negativas. "El año pasado no se produjo ninguna; y, en 2021, solo 3", apunta y señala que, por regla general, se encuentra receptividad por parte de los familiares de pacientes susceptibles de donar.

Entre otras cuestiones, cree que se debe a que ya se perciben los efectos de las charlas que ella misma y otros intensivistas, como miembros del comité de trasplantes, ofrecen en colegios e institutos. El objetivo es informar a niños y jóvenes de qué significa ser donante y de qué manera puede ayudar a personas enfermas y que sean estos los que abran esa misma conversación en su entorno, con su familia. Se pretende que se hable abiertamente del tema, de manera que cada persona exprese en vida su postura ante la donación. "Vemos que muchos familiares, en cuanto comenzamos la entrevista para la donación, nos dicen que el paciente ya había hablado en vida de su interés de ser donante. O de que no quería serlo. Lo importante es que se sepa la voluntad de las personas", asegura.

Aunque por el momento no se ha dado ningún caso en el área lucense, la ley que regula la prestación de ayuda a morir abrió la posibilidad de que los solicitantes donen sus órganos. Ya ha habido al menos dos casos en Galicia en  los que la persona que recibió la eutanasia donó sus órganos, lo que obliga a que la prestación se ejerza necesariamente en el hospital para hacer la extracción en cuanto se produce la muerte.

El Hula es un hospital extractor de órganos, pero no trasplantador. En la comunidad gallega, tanto en los hospitales de A Coruña como de Santiago se realizan trasplantes de hígado, riñón y pancreas —los más frecuentes— pero solo en el primero los de corazón y pulmón.

En el de Lugo sí se realizan trasplantes de tejidos. Por ejemplo, los oftalmólogos reemplazan córneas dañadas con otras sanas procedentes de una donación; los traumatólogos pueden hacer un trasplante óseo para un paciente oncológico que ha perdido hueso a casua de un tumor o los cirujanos vasculares pueden recurrir a tejido vascular donado para algunas intervenciones.

Por su parte, el director general de Asistencia Sanitaria de la Consellería de Sanidade, Jorge Aboal Viñas, destacó el miércoles "a conciencia solidaria" de los gallegos y subrayó que, en el año 2022, se registraron 128 donantes de órganos, posibilitando la realización de 296 trasplantes.
Aboal también aseguró que la Coordinación Autonómica de Trasplantes de la Axencia de Doazón de Órganos e Sangue (ADOS) tiene inscritas a "cerca de 122.000 personas" que disponen de la tarjeta de donantes de órganos.

En el conjunto de España, se está percibiendo un incremento de la donación y trasplantes en lo que va de año, cuando se registraron un 23% de donantes más que en el mismo período de 20221.