Vecinos de As Gándaras vuelven a denunciar carreras ilegales en el barrio

Se quejan de que los coches circulan a gran velocidad, derrapando y haciendo trompos, y piden que se intensifique la vigilancia policial en la zona, donde observan conducción temeraria no solo de noche
Una quedada en el polígono de As Gándaras de marzo del año pasado. AEP
photo_camera Una quedada en el polígono de As Gándaras de marzo del año pasado. AEP

Los vecinos de la zona de As Gándaras e Infanta Elena denuncian que las carreras ilegales al volante vuelven a ser una constante y aseguran que están "hartos" de soportar el ruido de los motores de madrugada y el "peligro" que entrañan las maniobras de algunos conductores.

"Estamos cansados de despertarnos a las tres y a las cuatro de la madrugada por el ruido de los derrapes", explica un vecino de Camiño da Roca, "ya que cogen velocidad en las rectas y entran en las rotondas a toda velocidad. A veces nos asomamos a la ventana y vemos que dan tres o cuatro vueltas a una rotonda, van a toda velocidad hasta otra, dan otras cuantas vueltas y vuelven. Y así se pueden pasar una hora o más".

Los residentes explican que las carreras no se realizan solo durante los fines de semana. "Vienen cualquier día, más el viernes y el sábado, pero también por la semana. Y a cualquier hora, aunque haya tráfico. La noche del Día de Reyes los pudimos grabar desde la ventana haciendo trompos cuando no eran ni las doce de la noche", dicen.

Los afectados explican que los infractores suelen conducir turismos de alta gama. "Son sobre todo BMW y Audi, y a juzgar por el ruido que hacen, tienen que tener los tubos de escape trucados, porque es un sonido atronador", señalan los residentes de la zona.

Algunos participantes en las quedadas de As Gándaras declararon públicamente que, en realidad, se trataba de meras concentraciones de aficionados al motor

Los afectados apuntan que la velocidad que alcanzan algunos conductores en esa zona "es una auténtica animalada" y piden que la Policía vuelva a intensificar la vigilancia para evitar incidentes.

A mediados de 2019 se incrementó el control policial en el polígono industrial a raíz de las reiteradas quejas de trabajadores de la zona, que alertaban de la concentración de decenas de conductores especialmente en las noches de los fines de semana y que se sucedieron durante años. Cierto es que los agentes acudían a cada llamada, pero los denunciantes estimaban que debía ponerse vigilancia porque, cuando se presentaba la patrulla, las concentraciones de conductores se disolvían pero eso no resultaba disuasoria y tras su marcha se retomaban.

Algunos participantes en las quedadas de As Gándaras declararon públicamente que, en realidad, se trataba de meras concentraciones de aficionados al motor para mostrarse unos a otros los vehículos, pero insistieron en que no competían y no infringían las normas de circulación. Sin embargo, los denunciantes aseguraban que algunos alcanzaban grandes velocidades, especialmente en la Rúa María Barbeito, donde hay una recta de más de un kilómetro.

A mediados de agosto un conductor temerario tuvo un sonado accidente en la Ronda da Muralla

La Policía Local empezó a poner controles periódicos en los accesos al polígono y, desde el primer momento, formuló denuncias por infringir el límite de velocidad o por circular sin el preceptivo seguro. A finales de julio, fue detenido un joven por circular por uno de los viales del polígono a más de 140 kilómetros por hora. A mediados de agosto un conductor temerario tuvo un sonado accidente en la Ronda da Muralla, cuando circulaba a más de 100 en una zona limitada a 30. Aunque algunos habituales de las quedadas de As Gándaras negaron su participación en una de ellas, la Policía concluyó que venía del polígono y que el accidente se produjo al competir con otro conductor.

Dos grupos. Quedadas alternativas
Los participantes en quedadas en As Gándaras debatieron en las redes sociales sobre la conveniencia de seguir citándose en el mismo sitio o cambiar de ubicación y desligarse del grupo que sí utilizaba el polígono como circuito. Finalmente, a finales de septiembre unos 130 coches se concentraron en el Pazo dos Deportes un sábado noche.
Infracciones en el parque
Mientras la cita transcurría con normalidad, aunque controlada por la Policía Local, en la explanada del pazo, en el parque empresarial se detectaron infracciones al volante y, de hecho, se denunció a tres personas por conducción temeraria. Esa misma noche se detectó otro de esos casos en la NVI, aunque no estaba claro si venía del encuentro del polígono de As Gándaras o no.
A Milagrosa o A Residencia
En barrios como A Milagrosa, A Piringalla u O Castiñeiro también se registran periódicamente quejas de residentes por conducción temeraria, especialmente las noches de los fines de semana.

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