La Policía Nacional detuvo a un hombre que presuntamente sustrajo 32 cajas de productos congelados de un camión, un arresto en el que resultó fundamental la colaboración de un vecino, que observó una conducta sospechosa y decidió fotografiarla.
El dueño de la mercancía acudió el pasado 2 de septiembre a la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano de la comisaría provincial de Lugo y explicó que el habían sustraído un total de 22 cajas de helado y 10 cajas de verdura congelada, que fueron tasadas por su propietario en más de 700 euros.
El hombre señaló que le habían robado la mercancía del interior de un camión refrigerado de reparto que había dejado estacionado en la vía pública mientras estaba en la hora de la comida. Según explicó, cuando regresó al vehículo para volver al trabajo y continuar con su jornada laboral, un vecino de la zona le contó que había visto como una persona había abierto el portón de la caja de su camión y se había llevado multitud de cajas de su interior.
El testigo observó cómo la persona que cogía la mercancía se subía a un turismo, de la marca Seat Exeo, y se marchaba del lugar. El hombre consiguió hacerle varias fotografías y se las envió al afectado.
Tal y como señaló ayer el portavoz de la Policía Nacional de Lugo, con los datos recabados por los agentes, "y una vez verificada la información aportada por el testigo", los investigadores llegaron a la conclusión de que el titular del vehículo fotografiado por el viandante era el autor material de los hechos. Finalmente, el sospechoso fue identificado y detenido el martes como presunto autor de un delito de hurto.
CONCESIONARIO. La Policía Nacional esclareció otro robo cometido el pasado 18 de agosto en un concesionario de coches de la capital. Según la denuncia que interpuso entonces el afectado, el ladrón se había llevado las llaves de varios turismos, así como un teléfono móvil, una tablet y una caja de caudales.
Los agentes abrieron de inmediato una investigación y, "tras llevar a cabo las comprobaciones precisas de los objetos sustraídos", identificaron al presunto autor y procedieron a su arresto. Tal y como señaló este miércoles el portavoz policial, el detenido es un vecino de la capital lucense, de 53 años de edad, al que ya le constan varios antecedentes por otros delitos.
Los dos robos fueron esclarecidos por los agentes del grupo encargado de investigar los delitos relacionados con el patrimonio y los atestados fueron remitidos al juzgado de guardia de la capital, "a los efectos oportunos", señalaron.
