Un vecino de A Campiña y los dueños de un concesionario de automóviles se cruzan acusaciones de acoso a raíz de un conflicto que mantienen desde hace años después de denunciar el primero el ruido que genera el funcionamiento del taller de camiones de la empresa, ubicado a pocos metros de su casa.
El vecino, que hace tres años comenzó a presentar recursos ante el Concello, la Axencia de Protección da Legalidade Urbanística (Aplu) y la Confederación Hidrográfica por las obras realizadas por los dueños del concesionario, consiguió la apertura de varios expedientes. Una de estas denuncias derivó en una orden de la Aplu que obliga a reacondicionar una parcela usada como aparcamiento, mientras que la CHMS también actuó contra el concesionario y propietarios de fincas por una canalización que afecta a un cauce fluvial.
Sin embargo, desde la empresa explican que sufren un "acoso" por parte del vecino, con denuncias por ruidos que aseguran que no prosperaron, al tiempo que añaden que disponen de las licencias para funcionar y están en trámites para conseguir la legalización de unas obras y la autorización de una ampliación que lleva años de retraso debido a los recursos del vecino.
Tras restar importancia a la orden de la Aplu, los dueños recuerdan que el concesionario comenzó a funcionar en 2004 tras la compra de fincas a vecinos, entre ellos un familiar del denunciante, aseguran.
