Una veintena de padres de niños del sur de la ciudad que se escolarizarán el próximo curso y que no obtuvieron plaza en los colegios que les tocaba por zona tomaron este jueves la decisión de no enviar a los pequeños a los centros que la Xunta les asigna como alternativa. El trastorno que les supondrían enviar a los niños a colegios alejados de su zona es tal que están dispuestos a aceptar la escolarización en una barraca de forma provisional, durante un curso o a lo sumo dos, mientras no se construya un nuevo centro. Así lo explicaron este jueves tras una reunión Luis Blanco, secretario de la federación de Anpas de centros públicos (Fapacel), y alguno de los padres asistentes.
A este respecto, el alcalde reiteró este jueves que el Concello ofrece un espacio en Sanfiz, al lado de la Policía Local, para que la Xunta haga unas instalaciones provisionales, y también una parcela en la zona para que construya un colegio.
Los progenitores discrepan con la Xunta sobre la temporalidad del problema. Dicen que ya en cursos pasados hubo niños que no pudieron ir al colegio de zona y que el gran número de población y de nacimientos que hay en el sur de la ciudad hará que se repita la situación en los próximos años, por lo que inciden en la necesidad de construir un nuevo centro.
Los padres aseguran que el próximo curso quedarán sin plaza en colegio de zona una veintena de niños. La Xunta informó este jueves de que no tendrá los listados definitivos de matrícula hasta hoy pero que, según las cifras provisionales, el 95% de los niños irán a los centros elegidos en primer lugar por sus familias.
Los padres inciden, además, en que las dos aulas a mayores que se crearán en la ciudad, en As Mercedes (sur) y Casás (norte) no solucionan el problema porque el problema de falta de espacio se irá trasladando cada año al nivel siguiente, durante toda la vida escolar de los alumnos.
Sobre la nueva unidad de As Mercedes, las críticas de algunos padres volvieron a repetirse este jueves porque los niños van a tener que utilizar un aula multifunción, para desayuno y almuerzo y, entre comidas, para recibir clases de gimnasia, primaria y secundaria. Según la información de que disponen algunos padres, a esta aula irá un curso de primaria porque solo tiene cabida para 16 escolares y a la suya irá el segundo grupo de primer curso de infantil.
La Xunta reiteró que tanto esta aula como la de Casás reunirán "perfectas condicións para a docencia". La directora de este centro quiso dejar claro este jueves que la adaptación se hizo con todas las garantías.
Educación también aclaró que todos los alumnos procedentes de centros adscritos al instituto de Sanxillao que solicitaron plaza "en tempo e forma" fueron admitidos. Las solicitudes de los que no lo hicieron de esa forma serán baremadas como si fueran de alumnos que proceden de centros no adscritos.
