Una usuaria de la capital lucense presentó un escrito ante la empresa Supervisión y Control, adjudicataria en Galicia del servicio de inspección técnica de vehículos (ITV), en el que le solicita que para la próxima revisión de su turismo le aplique los tres meses de moratoria a los que se acogió en 2020 con motivo del primer estado de alarma decretado por el Gobierno central debido a la pandemia de covid-19.
Esta lucense explicó que su vehículo fue matriculado el 26 de marzo de 2014, por lo que tuvo que pasar la primera ITV a los cuatro años, en 2018. La siguiente le tocaba dos años más tarde, en pleno confinamiento, pero no pudo acudir a esa revisión periódica obligatoria hasta el 3 de julio de 2020.
Indicó que entonces era "una persona física, sin trabajo", que estuvo "confinada hasta primeros de julio", con su turismo "aparcado en el garaje".
Este año le toca de nuevo la revisión de su vehículo, por lo que en su escrito reclama a la adjudicataria que cuente el plazo establecido de dos años a partir de la inspección real que pasó el 3 de julio de 2020 y no de la que le hubiese correspondido ese año, el 26 de marzo, si no se hubiese desatado la pandemia.
La usuaria asegura que si no se atiende su demanda tendrá "un grave perjuicio económico" y recurrirá al juzgado
FALLO JUDICIAL. Esta usuaria aduce en su reclamación la sentencia de la Audiencia Nacional, de finales de 2020, en la que establecía que, a los vehículos que tenían que pasar ese año la ITV entre el 14 de marzo y el 20 de junio, para sucesivas citas se tuviese en cuenta la fecha real en la que pasó la inspección y no la que le correspondería por su data de matriculación.
Ese fallo judicial se produjo a raíz de un recurso presentado por una asociación de transportistas contra la patronal de las concesionarias de la inspección técnica de vehículos debido a que esta no atendía sus demandas sobre los plazos de revisión a raíz de la moratoria por el estado de alarma.
Esta lucense, que fue asesorada por la federación de industria de CC.OO. de Lugo, explica en su escrito presentado ante la empresa Supervisión y Control que si no atiende su demanda le causará "un grave perjuicio económico" y recurrirá al juzgado.
PLAZOS. Los vehículos particulares nuevos tienen que pasar su primera inspección a los cuatro años de su matriculación. Después es cada dos años hasta que cumplan los diez y a partir de ahí anualmente.
Los usuarios están obligados a pasar la ITV antes de que se cumpla la fecha en la que esta caduca, de lo contrario se exponen a una sanción cuyo importe asciende a 200 euros.
Hasta hace un par de años, como se concedía un plazo de gracia de un mes, había conductores, sobre todo los que tenían vehículos antiguos, que se aprovechaban de esa medida para ir retrasando la revisión.
Hoy en día, aunque el usuario se retrase, le consta la inspección en la fecha en la que tenía pasarla obligatoriamente. Eso también sucede en el caso de que sea precavido y la anticipe.
Críticas
José Luis López aprovechó este caso para criticar a la adjudicataria de la ITV en Galicia porque se benefició primero del escudo social de los Erte, pues reguló a su plantilla, pero después no incrementó el personal para atender la mayor carga de trabajo que recibió una vez levantado el estado de alarma.
