La unidad de asistencia compartida del Hula logra la acreditación avanzada

Reconoce cómo la labor de los internistas ayuda a mejorar los resultados en salud de pacientes quirúrgicos
Personal medico del Hula, en una intervención. SEBAS SENANDE
photo_camera Personal medico del Hula, en una intervención. SEBAS SENANDE

La unidad de asistencia compartida del Hula acaba de recibir la acreditación de avanzada por parte de la Sociedad Española de Medicina Interna (Semi), convirtiéndose en la única española que tiene esa categoría.

La distinción acaba de ser promovida por la Semi para reconocer y auditar la labor de este tipo de unidades, en las que los internistas, como médicos generalistas dentro de los hospitales, contribuyen a mejorar los resultados en salud de los pacientes quirúrgicos. Entre otras ventajas, la preparación antes de la cirugía y el seguimiento postoperatorio en el que participan internistas además de cirujanos permite reducir la estancia hospitalaria, el consumo de fármacos y la tasa de reingresos, entre otros indicadores positivos.

El responsable de la unidad en el Hula, David Rubal, recuerda que en el hospital lucense se empezó a hacer asistencia compartida con Traumatología en fracturas de cadera. Superar el modelo tradicional de interconsulta –en el que el cirujano solo pedía colaboración del internista si se producía una descompensación tras la intervención– para llegar al de asistencia compartida –en el que ambos profesionales preparan al paciente desde antes de la operación- mejoró mucho la situación de los pacientes que se sometían una cirugía.

En la actualidad, la unidad también trabaja en el programa de recuperación rápida de cadera, centrado en pacientes a los que se les debe cambiar la prótesis, y en el seguimiento de pacientes complejos de Cirugía Vascular y Urología. Los internistas especialistas en Enfermedades Infecciosas colaboran en los casos de sepsis.

El programa, en el que Medicina Interna del Hula fue un servicio pionero y que, de hecho, formó a profesionales de otros hospitales españoles, se basa en la evidencia de que hasta el 80% de los problemas que se producen tras una intervención son del ámbito médico y no quirúrgico. Según recuerda el doctor Rubal hasta el 72% de los reingresos por complicaciones tras una cirugía también tienen razones médicas. Destaca que controlar las comorbilidades de los pacientes, las enfermedades crónicas que favorecen descompensaciones, resulta clave. A menudo estas suponen un riesgo a la hora de enfrentarse a una cirugía en mayor medida que la edad avanzada.