Un conductor fue condenado a pagar 1.620 euros de multa y a dos años de retirada de carné por triplicar la tasa permitida en la prueba de alcoholemia. El hombre condujo su turismo de forma irregular -sobre las cuatro y media de la madrugada del 4 de junio de 2020- por las calles Irmáns Carro, Río Eo, Río Sil y Rúa Conde de Lugo.
Los agentes le dieron el alto y lo sometieron a las pruebas de alcoholemia, en las que arrojó una tasa de 0,82 miligramos de alcohol. El hombre presentaba además otros síntomas de embriaguez, como apatía o expresión verbal incoherente.