El último balance de criminalidad del Ministerio del Interior sigue situando a Lugo entre las provincias más seguras, pero hay un delito que sigue en ascenso: el tráfico de drogas.
En el primer trimestre del año se registraron en la capital doce operaciones por tráfico de estupefacientes, un 140 por ciento más respecto a 2017. En la provincia fueron 19 en total, un 111 por ciento más, según ese balance.
La estadística es fría y no apunta a los tipos de droga ni a las cantidades incautadas, pero sí refleja una realidad que lleva haciéndose evidente este año con operaciones como las llevadas a cabo contra redes de tráfico de hachís y que supuso, ya en abril, por ejemplo, el anuncio de un golpe que acabó con 56 arrestos y la incautación de una tonelada de esa droga.
Esa operación, seguida de otras detenciones e incautaciones, puso en evidencia las dimensiones del tráfico de hachís. De hecho, ese golpe, que se convirtió en la mayor operación contra el tráfico de drogas por vía terrestre en Galicia, tuvo su antecedente en un arresto practicado en 2016 en la zona de As Gándaras, donde se logró la confiscación de kilo y medio de esa droga.
A través de esa operación se conoció la existencia de un grupo organizado que traía la droga a Galicia desde el sur y que tenía alquilados pisos y trasteros por toda la ciudad para el almacenamiento de las partidas de hachís.
Desde que se conoció esa gran operación, en la que trabajaron conjuntamente Policía y Guardia Civil, bajo la dirección de un juzgado de Lugo, los arrestos se han ido sucediendo y a finales del pasado mes, por ejemplo, se produjeron dos nuevas detenciones y se localizaron otros 110 kilos de esa droga, cuando se intentaba hacer llegar a A Coruña.
Este año se descubrió incluso una red que comercializaba hachís en el mercado ilícito en forma de galletas y pastas de repostería, que se hacían llegar por correo a los destinatarios.
A principios del pasado mes también hubo varios detenidos en Lugo, cinco de los cuales fueron enviados a prisión, por otro caso de tráfico de drogas. En ese caso, a los arrestados, de origen latino, se les encontraron unos 300 gramos de cocaína.
HURTOS Y ROBOS. El últimos balance de criminalidad apunta, en tanto, que los hurtos bajan, si bien lo hacen más en la capital que en la provincia.
En la ciudad se registraron en el primer trimestre del año 212, un 10 por ciento menos, mientras que en la provincia se contabilizaron 376, un 6,9 por ciento menos respecto a un año antes.
La evolución es dispar, sin embargo, en cuanto a los robos. Así, en la capital caen tanto los robos en domicilios como los registrados en otros establecimientos o los que se producen con fuerza e intimidación.
Crecen, en cambio, ese tipo de delitos en la provincia, donde hubo 77 en domicilios y 117 en total teniendo en cuenta establecimientos y otras instalaciones.
Caen también las sustracciones de vehículos, que hace pocos años habían registrado un pico.
Campaña
Lugo puso en marcha este año una campaña de prevención con locales que ayudan a mujeres que se ven amenazadas.