Thelma y Louise, en las berzas

La fuga de la Policía de un lucense y su acompañante acaba cuando se lanzaron por un desnivel al final de una calle sin salida y su coche quedó tripa arriba en una huerta
El desnivel por el que salió volando el coche y el vehículo, entre las berzas, tras darle la vuelta. SEBAS SENANDE EP
photo_camera El desnivel por el que salió volando el coche y el vehículo, entre las berzas, tras darle la vuelta. SEBAS SENANDE / EP

Un lucense fue detenido en la madrugada del viernes tras darse a la fuga con su coche para tratar de huir de la Policía Nacional. La escapada, sin embargo, fue muy corta y acabó al estilo de la película Thelma y Louise: con el vehículo volando al final de una calle cortada. Por suerte, no era el Gran Cañón del Colorado, como en la película, sino un desnivel de más un metro que daba a una huerta de berzas y tomates, donde el coche quedó patas arriba tras dar unas vueltas.

El conductor, de unos 30 años, fue detenido y posteriormente puesto en libertad con cargos por darse a la fuga, conducir sin carné, bajo los efectos del alcohol y además negarse a soplar. Su acompañante, que según algunas fuentes viajaba dormido en el asiento del copiloto, no sufrió más daños que los del coche, ya que era de su propiedad.

El desnivel por el que salió volando el coche. SEBAS SENANDE

Los hechos sucedieron en torno a la 1.00 horas del viernes en el entorno de A Piringalla. En ese momento, una patrulla de la Policía Nacional que estaba haciendo su ronda sorprendió a un vehículo haciendo un trompo y circulando de manera peligrosa. Los agentes encendieron las luces de aviso para darle alto, pero el conductor salió a toda velocidad por una de las calles para tratar de despistarlos.

La escapada, no obstante, no fue muy larga: un par de calles después el conductor enfiló la calle Francisco Moure, una vía sin salida. La circunstancia no frenó al piloto, que enfiló a toda velocidad el ribazo y voló hasta parar en la huerta. Los agentes tuvieron que dar la vuelta al vehículo para poder rescatar a los dos protagonistas de huida. Hasta el lugar se desplazaron también miembros de la Policía Local.

El coche, en la huerta una vez le dieron la vuelta. EP

La sorpresa por el final de la escapada fue aún mayor cuando se pudo comprobar que el conductor vivía en esa misma calle, por lo que debía saber perfectamente que no había salida. El dueño de la huerta ha presentado reclamación de daños por la berzas y los tomates que le destrozaron.