El sistema actual de tramitación de la petición de protección internacional y asilo político quedó obsoleto. A esta conclusión, llegó ayer el técnico de Cáritas Española Paco Aperador, quien impartió una jornada formativa para voluntarios de esta ONG, en el hotel Méndez Núñez.
Aperador manifestó que una buena parte de los extranjeros que están llegando a España son solicitantes de protección internacional y asilo político, debido a la situación interna grave que se vive en sus países de origen. Sin embargo, el sistema actual no da abasto a todas las peticiones y una muestra de ello es que la primera cita para entrevista se está dando aquí en Lugo estos días para enero de 2021.
"Lo más destacado que estamos viviendo en España, en cuanto a inmigración, es la llegada masiva de personas solicitantes de asilo y refugio político. Y esta situación está demostrando que el sistema está obsoleto. Las citas, para hacer el trámite, tardan un año o más y mientras tanto esta gente -a veces, familias con niños pequeños- no puede trabajar y acaba llamando a la puerta de Cáritas. Nos encontramos, ahora mismo, desbordados para poder atender a toda esta gente", afirma el técnico de Cáritas Española.
"Hay una llegada masiva de personas que solicitaron asilo político y se está demostrando que el sistema está obsoleto", señaló Operador
Paco Aperador observa, además, que existe una contradicción en la actual Ley de Extranjería que, según él, "condena a la invisibilidad" a los inmigrantes durante tres años hasta que pueden solicitar permiso por arraigo social y arreglar sus papeles. "Les llamamos ilegales por no tener papeles pero ninguna persona es ilegal", insiste este técnico de Cáritas.
Para Paco Aperador, las personas están por encima de los papeles, independientemente de la situación administrativa en que se encuentren. "Hay necesidades y derechos por encima de la situación administrativa de residente o no que tenga esa persona. Los derechos no pueden estar condicionados a unos papeles", manifiesta el técnico.
Cáritas acogió en Lugo, durante el pasado año, a unos 200 inmigrantes, a los que ofreció servicios como asesoría jurídica, orientación laboral, clases de apoyo para el acceso a la nacionalidad, cursos de informática y cocina y talleres de integración sociocultural.
