En un control establecido por la Policía Local en la madrugada de este miércoles en la Ronda do Carme los agentes detectaron que un patinete eléctrico circulaba a 63 kilómetros por hora, superando los 25 kilómetros por hora establecidos como máximo para los vehículos de movilidad personal. Esta infracción le acarreará a su conductor, un joven de 24 años, una multa de 400 euros.
Según explicó el portavoz policial, dicho patinete es "uno de los clasificados como VMP", por lo que se precisa permiso de conducción, pero este joven "carece de la autorización administrativa para conducir, por no haberla obtenido nunca". Debido a esta segunda infracción, le instruyeron diligencias por un delito contra la seguridad vial. El conductor se enfrenta a una pena de prisión de 3 a 6 meses, multa o de 31 a 90 días de trabajos en beneficio de la comunidad.