El fuego no tiene clemencia y las llamas pueden acabar con todo el patrimonio de una persona en cuestión de minutos, por lo que asegurar viviendas y negocios contra este riesgo se ha convertido en práctica habitual de los propietarios. Las aseguradoras estiman que en la provincia de Lugo se registra un incendio cada cinco horas —en concreto cada 4 horas, 53 minutos y 38 segundos— lo que suma 150 siniestros al mes y 1.800 al año.
Esta frecuencia sitúa a Lugo por debajo de la media del país, ya que ocupa el puesto 32 de las 52 provincias, una lista que encabeza Vizcaya, con un fuego cada 20 minutos, y que cierra Ceuta, donde se contabiliza una incidencia cada cuatro días y 19 horas. Esta al menos es la conclusión a la que llega la Asociación Empresarial del Seguro, Unespa, tras analizar los datos recabados por un total de 22 compañías a lo largo de los dos últimos años.
El informe revela además que la mayor parte de los inmuebles protegidos por el seguro frente a incendios son viviendas, seguidas de comercios, comunidades de propietarios, industrias y otro tipo de espacios.
COSTES. La aseguradoras ganan clientela a la par que aumenta el desembolso que tienen que realizar por los siniestros. Según calculan, las compañías pagan al año en España un total de 422 millones de euros para indemnizar incendios. Y solo en la provincia lucense, el coste de este tipo de incidentes alcanza los tres millones anuales, ya que el pago medio que estima Unespa en Lugo es de 1.664 euros por fuego. Si se tiene en cuenta solo la ciudad, la cifra desciende a 1.154 euros.
Lugo se sitúa por debajo de la media nacional en frecuencia de este tipo de siniestros. Ocupa el puesto 32 de las 52 provincias
Esta cantidad, sin embargo, varía considerablemente en función de que el patrimonio afectado sea una vivienda o un negocio. De hecho, a nivel general, el coste medio por los daños ocasionados por un incendio en un domicilio es de 1.200 euros, mientras que en un comercio se eleva a los 2.400 y en una industria ronda los 10.000. En otro tipo de patrimonios, como escuelas u hoteles, entre otros, las compañías pagan una media de 12.000 euros por cada siniestro.
"El fuego", apuntan desde Unespa, "es un riesgo de probabilidad relativamente baja, pero de efectos potencialmente elevados, ya que su capacidad alcanza incluso a la reducción del objeto afectado a cenizas". Ante este riesgo, sin duda, será mejor prevenir que curar.
