Seguimiento desigual de la huelga en los centros de trabajo lucenses

Hubo pequeños negocios que cerraron sus puertas y en la administración autonómica la incidencia fue del 5 al 18%, según la Xunta

Una tienda de moda en la Rúa San Marcos. XESÚS PONTE
photo_camera Una tienda de moda en la Rúa San Marcos. XESÚS PONTE

La calle, que se tiñó de violeta, fue el termómetro que midió este viernes el éxito del 8-M en la capital lucense. Como sucedió en el resto de la provincia, fue más concurrida la participación en la catarata de manifestaciones que se celebraron a lo largo del Día Internacional de la Mujer, con una notable presencia juvenil, que el paro en los centros de trabajo. Fue una tranquila jornada reivindicativa.

La incidencia de la huelga fue desigual dependiendo del sector y la fuente consultada. Así, por ejemplo, la delegación territorial de la Xunta en Lugo, que fue el origen o el destino de la mayoría de las movilizaciones, fue la de Galicia en donde se registró un menor seguimiento del paro, el 5,21%, según informó la administración autónómica.

En educación y sanidad la cifró en torno al 10% —la CIG la elevó al 30% en el Hula y Atención Primaria, excluidos los servicios mínimos— y en justicia alcanzó el 18%.

En el campus universitario cientos de alumnas y profesoras secundaron la huelga. Los que se acercaron a la Biblioteca Intercentros a estudiar se encontraron con ella cerrada. Su entrada principal estaba presidida por un cartel con la convocatoria de la Plataforma Feminista.

La de este viernes además de una huelga laboral, de cuidados y estudiantil, también lo fue de consumo

El llamamiento hecho por este colectivo de que se colgasen mandiles en las ventanas y los balcones como muestra de apoyo al 8M apenas tuvo eco en los edificios de la capital lucense.

En la corporación municipal el seguimiento fue elevado entre los concejales que tienen una asignación. Todos los del equipo de gobierno, del PSdeG-PSOE, con la alcaldesa a la cabeza, se sumaron. Solo hicieron un alto para participar en los actos institucionales convocados precisamente con motivo del 8M. También la secundaron las ediles de Lugonovo y BNG y el portavoz de Ace-EU. No así sus compañeros del PP y Ciudadanos.

En donde hubo un importante seguimiento, según la CIG, fue en la compañía de telemárketing Abante, uno de los mayores empleadores de la ciudad, en la que más del 80%de la plantilla son mujeres.

La de este viernes además de una huelga laboral, de cuidados y estudiantil, también lo fue de consumo. Varios negocios cerraron sus puertas, desde tiendas de alimentación, como Bico de Grao o A despensa do avó Francisco, hasta comercios de moda, como Mecos o Lefties, y de complementos, como Opticalia Callao, entre otros. En este sector la incidencia fue menor. 

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