Un conductor que provocó un accidente cuando conducía bebido y se negó a realizar la prueba de alcoholemia aceptó este miércoles una condena de nueve meses de cárcel, que inicialmente le serán suspendidos, y un año sin carné.
El acusado, C.M.P., se puso al volante de un Seat Ibiza el 13 de julio de 2015, después de haber ingerido bebidas alcohólicas. Sobre las siete de la tarde, cuando circulaba por la calle San Eufrasio, realizó un cambio de dirección de forma antirreglamentaria –a la altura de la intersección con Carril dos Indios– e invadió el carril por el que circulaba correctamente otro vehículo. El coche del acusado colisionó contra la parte delantera derecha del otro turismo y le causó desperfectos en la aleta, el capó, el faro y la defensa. Además, la conductora afectada resultó herida y tardó un mes en recuperarse.
Tras el accidente, la Policía Local acudió al lugar y comprobó que el acusado presentaba "evidentes síntomas" de embriaguez, como rostro pálido, comportamiento locuaz, habla pastosa, repetición de frases y deambulación vacilante. Los policías le pidieron al conductor que se sometiera a la prueba de alcoholemia, pero el hombre se negó, por lo que fue acusado de dos delitos contra la seguridad vial. El hombre reconoció este miércoles los hechos ante el juez del Penal 2.
El mismo juzgado celebró una vista contra otro conductor, R.P.D., que se enfrenta a una multa por conducir con el carné retirado el 10 de septiembre de 2016. La Policía Local le dio el alto sobre las dos de la madrugada en la calle Angelo Colocci y comprobó que tenía el carné retirado porque había perdido todos los puntos.
Se queda un año sin carné por conducir ebrio, chocar y negarse a hacer el control de alcoholemia
El conductor realizó un cambio de dirección de forma antirreglamentaria e invadió el carril por el que circulaba correctamente otro vehículo
