El cribado de dos días organizado por el Sergas en la capital lucense comenzó este miércoles y tan solo 580 de los 1.500 jóvenes citados acudieron a la llamada de la Xunta, sumando así una tasa de participación por debajo del 40%.
Este jueves están convocados otros 1.500 lucenses, comprendidos entre los 20 y los 30 años. Esta franja es la más afectada por la quinta ola y en la que la vacunación va más retrasada.
El personal sanitario hace un llamado a la responsabilidad ciudadana: "La decepción es alta; en estas campañas se invierte tiempo, dinero y personal sanitario. Es necesario cortar la transmisión del virus y eso se consigue con una alta participación. Además, estamos situados en un punto de fácil acceso para la gente joven", lamenta Juan Pérez Peña, subdirector de enfermería del Hula.
La toma de muestras PCR tuvo lugar en la facultad de Veterinaria de las 16.00 hasta las 21.00 horas, el mismo horario que este jueves. El objetivo de las pruebas es "detectar casos asintomáticos y aplanar la curva actual", según comentó a este diario Pérez Peña.
El encargado del cribado incide en el peso de la variante Delta en la expansión de la quinta ola: "A pesar de que la mortalidad es menor, el número de contagios es muy elevado, un factor que complica las tareas de rastreo", explicó este lucense.
Con el objetivo de detectar casos asintomáticos los sanitarios atienden a todo aquel que acuda al cribado, incluso a aquellos que no cuenten con cita previa: "Nunca hay un 100% de asistencia, así que si vienen voluntarios dispuestos a realizar la prueba no les dejamos escapar", afirma María Condal, enfermera del equipo covid en Lugo.
Además de PCR, los sanitarios también disponen de pruebas de antígenos, para aquellos lucenses que presenten síntomas.
BAJA ACEPTACIÓN. Durante los últimos días se han realizado varios cribados en el área sanitaria de Lugo. La tónica general es "preocupante" puesto que solo en uno, en el de Cervo (63%), se sobrepasó el 50% de participación. En alguno de A Mariña se registró una marca inferior al 45%, cifras que chocan con la petición que hizo el Sergas a la ciudadanía para acudir de forma "masiva" a la citación. Esta actitud podría deberse, entre otros factores, a la irresponsabilidad individual.
El cribado de la capital llega después de que el martes se comenzase a aplicar la pauta de vacunación a los menores de 30 años en Lugo.
