La calle dio pruebas de que en Lugo había ganas de que empezara la fiesta y el jolgorio sin remedio se extendió en cuanto empezó a manar el vino de la fuente de San Vicente. El acto fue de los más concurridos del día.
Se cumplen 50 años del milagro de la fuente, una idea concebida por el recaudador de impuestos Ezequiel García Rodríguez y que se celebró por primera vez en las patronales del año 1969. En aquella primera ocasión, se echó el vino en el enganche de la fuente, en el jardín del Obispado.
La celebración del medio siglo motivó que este año el vino volviera a manar de la fuente durante las patronales. Fue una cita excepcional, porque normalmente solo hay una cita anual, durante el día de la patrona de los hosteleros, Santa Marta, el 29 de julio.
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