El área de cultura del Concello de Lugo destinó el año pasado a las patronales de San Froilán 920.000 euros. Así lo dio a conocer la concejala Maite Ferreiro en la reunión celebrada ayer por la comisión de fiestas, en la que están representados los cuatro grupos municipales.
Ese importe supuso un desembolso de 289.000 euros más que en las dos ediciones anteriores de estas fiestas declaradas de interés turístico nacional.
Las patronales de la capital lucense tuvieron en 2017 y 2018 un presupuesto de 639.000 euros, una cantidad que se mantenía desde 2011.
Cultura, área que gestiona el BNG desde el año pasado, justifica ese mayor desembolso porque pretendía darle «un pulo» a las patronales «en cantidade e calidade de actuacións para facer do San Froilán a gran festa do outono galego». Además, sostiene que se han visto incrementados los costes de los servicios.
Si los gastos ascendieron a 920.000 euros en 2019, los ingresos, sobre todo por la ocupación de suelo por parte de las atracciones de feria y de las casetas y puestos del pulpo, ascendieron a 529.000 euros, cifra similar a ejercicios anteriores. Eso supuso un desfase de 391.000 euros.
Maite Ferreiro explicó además que el año pasado se gestionaron todos los gastos desde cultura, excepto la instalación de sanitarios en el entorno del recinto ferial, que lo asumió el área de medio ambiente. Mientras que en ejercicios anteriores se repartían con otros departamentos, como por ejemplo infraestructuras, que sufragaba la instalación eléctrica.
Conciertos
El año pasado pasaron por el San Froilán, entre otros, Don Patricio, Dulce Pontes, Def con Dos o Los Enemigos, entre otros.
Protagonismo local
La edil de cultura también resaltó que en las patronales de 2019 se intentó darle «o protagonismo ás artistas lucenses» colaborando «con multitude de grupos e colectivos da cidade», que recordó que tuvieron «presencia durante todos os días das festas».
Ya en proceso la edición de 2020
Maite Ferreiro aseguró que el equipo de cultura ya está trabajando en el San Froilán del próximo mes de octubre, con la finalidad de que sea «a gran festa do outono galego».
