La situación excepcional generada por la pandemia del coronavirus permitió este viernes la reconversión de la Ronda da Muralla, que pasó a ser compartida por peatones y conductores.
El carril más próximo al monumento se cerró al tráfico, de modo que la ciudad gana un paseo de 2,5 kilómetros en una zona emblemática y que, además, ha estado atestada muchas tardes desde que se permitió al conjunto de los ciudadanos volver a salir a pasear y hacer deporte. La lluvia hizo que ayer hubiera menos paseantes.
La acotación de un carril de la muralla para los peatones se adopta por la necesidad de disponer de espacios públicos para los paseos, evitando de ese modo que se formen aglomeraciones humanas que son un riesgo sanitario.
Con todo, la medida no deja de tener un carácter simbólico, dado que desde hace años se baraja la idea de hacer peatonal el anillo vial que rodea a la muralla, que hasta ahora ha sido, además, uno de los ejes centrales del tráfico.
La medida aplicada ahora, aunque afecta solo a uno de los carriles de la Ronda, va más allá de lo proyectado hasta el momento para abordar su peatonalización pues hasta ahora las ideas en las que se trabajaba consistían en abordarla por fases, empezando por A Mosqueira, la zona inmediata al único tramo que hasta ahora está vedado a los coches en la Ronda.
El teniente de alcalde, Rubén Arroxo, acompañado por el edil Alexandre Penas, recorrió este viernes por la mañana parte del espacio abierto a los peatones, que fue señalizado por una empresa para advertir a los conductores de la acotación de espacios de circulación. El edil destacó que el cierre de un carril no afectará al tráfico, ya que el volumen de coches bajó mucho por la crisis sanitaria.
Arroxo insta a aprovechar otras zonas de recreo para evitar aglomeraciones
Arroxo aprovechó para volver a instar a que en la Ronda, así como en el adarve de la muralla, se circule en el mismo sentido que los coches. Esa recomendación se hace con el objetivo de evitar que los ciudadanos se crucen de frente, minimizando de esa forma el riesgo de contagios. Ese consejo sobre el sentido de los paseos es excepcional para el caso del entorno de la muralla ya que, con carácter general, el Concello insta a los ciudadanos a que circulen por la derecha de las aceras, siguiendo lo aconsejado en el Código de Circulación.
ALTERNATIVAS DE PASEO. Tras la apertura de ese carril de la Ronda, Arroxo, responsable del área de movilidad, incidió ayer en que Lugo cuenta con muchos espacios verdes, parroquias y barrios en los que se puede disfrutar caminando y evitando las aglomeraciones en el centro de la capital.
El Concello insta a caminar en el sentido recomendado para evitar cruzarse de frente con otras personas y así evitar riesgos sanitarios
El edil hizo esa recomendación tras constatar que, en los primeros días de salidas controladas, tanto el adarve como la Ronda han sido los espacios más frecuentados para hacer deporte o pasear.
Hay, no obstante, otras zonas que en los últimos días han estado también muy concurridas, como el parque del Miño, al que han acudido cientos de personas cada tarde a pasear o hacer deporte.
En general todos los parques periurbanos de Lugo están siendo muy utilizados y eso ha dado lugar a concentraciones de gente que no siempre permiten guardar las correspondientes distancias de seguridad entre peatones.
