Una recompensa por duplicado

Estefanía Ramos, que ha obtenido el premio Nacional de FP, empezó a trabajar en la banca tras acabar estos estudios
Estefanía Ramos. ADRA PALLÓN
photo_camera Estefanía Ramos. ADRA PALLÓN

El esfuerzo y el sacrificio suelen verse recompensados. Ese es el caso de una joven lucense, Estefanía Ramos Bellas, que acaba de obtener el Premio Extraordinario Nacional de Formación Profesional en administración y gestión. Se han concedido en todo el Estado 26 de diversas familias profesionales. También logró antes a nivel autonómico ese galardón, que recogió ayer en la Cidade da Cultura, en Santiago de Compostela.

Estefanía Ramos, de 34 años, cursó este grado superior de Formación Profesional en el IES Muralla Romana de Lugo. Sus estudios tuvieron una doble recompensa, además de obtener estos premios a nivel gallego y nacional, le facilitaron encontrar un puesto de trabajo. Esta joven se encarga en Caixa Rural Galega de la gestión de las cuentas de las comunidades propietarios de la capital lucense y de los procesos de testamentaría.

"Gracias en parte a la FP estoy donde estoy", dice esta lucense, que considera que este sistema formativo es "una alternativa muy buena", según su experiencia, para acceder al mercado laboral e incluso para el que quiera seguir estudiando "una oportunidad para acceder a un grado universitario".

Obtener ambos premios extraordinarios, que se conceden a los mejores expedientes académicos, supone para Estefanía Ramos "una satisfacción" y "una manera de reconocer el esfuerzo".

Estudió Derecho y después compaginó el ejercicio de la abogacía con los estudios de FP en el IES Muralla Romana

Esa distinción no solo es un reconocimiento para la premiada, también lo es para el centro en el que cursó sus estudios, según destaca el director del IES Muralla Romana, José Antonio Corredoira.

LETRADA. Estefanía Ramos compaginó sus estudios de FP con el ejercicio de la abogacía. Acudía al instituto en el turno de tarde. Tenía clase de 18.00 a 23.00 horas. Durante esos dos cursos sacrificó horas de ocio para "completar" su formación. Cuando acabó, colgó la toga al surgirle la oferta laboral de Caixa Rural Galega, entidad financiera en la que realizó primero las prácticas que le correspondían a su grado superior. "Fue un trampolín para entrar en el sector bancario", explica.

Antes de incorporarse a las aulas del Muralla Romana Estefanía Ramos había sacado la licenciatura de Derecho en la Universidad da Coruña. Cuando acabó esta carrera, preparó las oposiciones de judicatura, pero tuvo que dejarlo por motivos personales y "dar un giro en su vida". Durante casi cinco años ejerció como abogada en bufetes de Lugo y A Coruña, hasta que la FP le abrió las puertas de la banca, que era su meta laboral.

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