A Fervedoira sufre una plaga de ratas que está fuera de control, según Daniel Vázquez, un vecino que ha visto cómo los roedores le mataban a 42 gallinas.
El problema viene de lejos y tiene su origen en una fuga de aguas residuales de un colector que baja hacia A Fervedoira desde el barrio de As Gándaras, sostiene.
Los vecinos llevan dos años ya sufriendo la fuga de aguas residuales, que genera unos olores insoportables. Y es toda esa suciedad la que ha provocado que proliferen las ratas, que son una plaga en la zona desde hace ya mucho tiempo, dice Vázquez.
El vecino dice que los residentes en la zona llevan ya mucho tiempo llamando a las puertas de las administraciones buscando una solución que no llega, y en tanto, lo que ha llegado es una voracidad disparada de la cada vez mayor colonia de ratas que ronda por la zona y que causa ya temor.
El último gran estropicio ha sido la matanza de las gallinas. Es un daño económico, pero también una señal del peligro que empieza a representar la plaga.
El vecino que vio como acababan con su gallinero reclamaba este lunes que se haga un plan urgente de desratización en la zona y, sobre todo, que se repare la tubería rota, que genera un problema grave en toda la zona, decía.
En el lugar se quejan con frecuencia del abandono de ese entorno de la ciudad y los vecinos advierten de que la fuga de aguas residuales, además de causar un problema de salubridad en el entorno de las viviendas, puede acabar afectando al río.
La masacre de las gallinas habría sido el incidente más serio provocado hasta ahora en la zona por la plaga de ratas, pero la presencia de los roedores lleva ya tiempo causando inquietud entre los residentes en esa zona de las afueras de la capital.
