Un vecino presentó una queja en el Concello después de que un conductor del bus urbano realizase supuestamente una maniobra peligrosa que casi arrolla a su mujer cuando transitaba por la acera en el cruce de la calle Camiño Real con Concepción Arenal.
Según explica el ciudadano, el bus «iba a una velocidad excesiva y se pegó demasiado a la acera, pudiéndose llevar por delante a mi mujer, que pasaba por allí en ese momento». Añade que las personas que transitaban en ese momento por la calle también se asustaron y considera que el conductor realizó esa maniobra peligrosa al ver «libre de vehículos el tramo y el semáforo de la esquina en verde».
Además, el hombre asegura que, cada vez que se sube al bus en esa línea, «se te salen las tripas en el viaje», porque son habituales los «acelerones» y los «frenazos».
En el informe de respuesta del Concello a esta queja ciudadana, en el que se piden disculpas a los afectados, se explica que se verificó que la conductora asignada ese día al servicio no superó la velocidad máxima permitida, aunque se añade que se realizan controles internos para verificar que la empleada cumple la normativa.
Las quejas por la velocidad de los buses suelen ser habituales.
