El PXOM pendiente rebajará edificabilidad en las orillas del Rato

Zona del Rato sobre el que se preveía un vial. SEBAS SENANDE

El estudio hidrológico constató, como avisó Adega, que algunos desarrollos urbanísticos afectaban al río y a su ámbito de protección 

La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS) ya tiene en sus manos los estudios hidrológicos del 5% del PXOM pendiente de aprobación que tuvo que hacer el Concello después de que varios colectivos ecologistas (entre ellos Adega) alertaran de que se preveían desarrollos urbanísticos sobre cauces o zonas de influencia de estos. El trabajo que el Ayuntamiento encomendó a la empresa Epypsa viene a constatar, al menos en parte, esas advertencias, y en consecuencia habrá que reducir los desarrollos que se habían planificado en la zona alta del Rato y en algún otro enclave del municipio.

El problema de base en el Rato es que aproximadamente unos tres kilómetros de río, desde el puente de Paradai hacia arriba, no aparecen recogidos, y sobre el curso y a los lados, en terrenos de dominio público hidráulico, se planificaron varios desarrollos urbanísticos, algunos en zonas inundables. Así, por ejemplo, figuraban equipamientos públicos unos metros arriba de Ponte Romai (en línea recta con el campo de fútbol Luis López Gorgoso); la ampliación del núcleo de A Torre hasta el límite mismo del río, y la construcción de un vial justo encima del cauce para unir la Rúa Fisterra con otra calle que se haría unos metros más arriba de la Ronda Norte y en paralelo a esta.

También se preveía otro vial que atravesaría el cauce y su zona de protección para enlazar Paulo Fabio Máximo en el parque empresarial de As Gándaras; otra zona de equipamientos públicos justo entre ese vial y el barrio de O Souto, donde confluyen los dos manantiales del Rato y el Rego das Gándaras, así como suelo industrial (ampliación de O Ceao) entre Duquesa de Lugo y uno de los afluentes del Rato. Este último apenas se ve afectado.

Sectores en suspenso. La mayor parte de estas zonas, no todas, forman parte del 5% pendiente de aprobación y el grafiado del río y de su ámbito de protección que ahora se ha hecho implica revisar los desarrollos urbanísticos que se habían previsto para ellas. Necesariamente habrá que reducirlos -reconoce el concejal de medio ambiente, Daniel Piñeiro- y reordenarlos, para dejar las zonas verdes, por ejemplo, hacia el cauce y así aprovechar mejor el terreno y proteger el ámbito fluvial. La ordenación correrá a cargo de los propietarios, cuando desarrollen los terrenos, aunque lógicamente tendrá que tener el visto bueno de la administración.

Además de los cambios que habrá que hacer en los sectores que todavía no están aprobados, los estudios también señalan la necesidad de llevar a cabo una ampliación para el paso del Rato bajo la vía del tren en las proximidades de O Ceao, en una zona donde está previsto suelo industrial. Los estudios de precipitaciones y avenidas futuras apuntan a que podría llegar a formarse un tapón en ese lugar, por lo que los propietarios deben plantear una solución.

EL PROCESO. Los desarrollos que se habían diseñado para el área del Rato fueron aprobados, dentro del conjunto del PXOM, por el pleno municipal e incluso por la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, a pesar de que Adega advirtió y alegó contra ellos y de que la Xunta, en distintos momentos, hizo ver el problema del Rato y recomendó grafiar los ríos y regatos.

En 2011, la Xunta dio el visto bueno al 95% del PXOM y dejó fuera de aprobación el 5% restante, por razones diversas, entre ellas fallos de identificación de la red fluvial y las construcciones previstas en zonas inundables del Rato. El Concello hizo correcciones y justificaciones y en 2013 envió a la Xunta el documento revisado, pero sin corregir el problema del Rato. A los pocos meses, la Xunta suspendía el plazo para resolver sobre ese 5%, en parte debido a la existencia de un informe de la CHMS en el que se requería al Concello la realización de estudios hidrológicos de todos los cursos existentes en ese territorio.

A partir de ese momento comenzó una discusión sobre la pertinencia o no de recoger los ríos a ese nivel de detalle, ya que el gobierno local sostenía que para el resto del PXOM no se había exigido, y sobre quién tendría que hacer ese trabajo. Casi tres años después, ya con Lara Méndez al frente del gobierno municipal, este decidió asumir la realización de esos estudios, aunque todavía tardarían más de un año en contratarse.

El resultado ya está en manos de la CHMS, que podría emitir su dictamen en breve. Si es favorable, el siguiente paso sería remitir el documento a la Xunta para el visto bueno definitivo y la posterior aprobación por el pleno municipal. Con todo, la Xunta hizo otros requerimientos respecto a ese 5% del PXOM que están menos avanzados, por lo que aún falta.