La Policía Local trabaja ya en la redacción de un plan de tráfico para el próximo curso, en el que entrarán en juego varios factores, desde la peatonalización de un carril de la muralla a los condicionantes que pueda ir marcando la pandemia del coronavirus.
En todo caso, según se avanzó en la comparecencia de este jueves de Lara Méndez y Jesús Piñeiro, la idea de partida es seguir permitiendo a los padres estacionar en doble fila en las calles de los colegios durante un periodo de diez minutos a las horas de entrada y salida de clase.
El Concello estima que ese sistema, establecido el año pasado, funciona y el responsable de la Policía Local puso como prueba de ello el hecho de que bajaron las sanciones por el estacionamiento de coches en doble fila a las puertas de los colegios. La percepción del Concello es que ha aumentado la concienciación de los padres y que estos, por tanto, se atienen a ese plazo de diez minutos y no dejan los coches mal estacionados pasado ese tiempo.
Respecto a los planes de tráfico concretos para el curso próximo, Méndez y Piñeiro apuntaron que aún se trabaja en su diseño.
La vuelta al colegio se plantea como un desafío debido a la crisis sanitaria. De momento se van estableciendo pautas para la relación de los alumnos en el interior de los centros, pero los planes de acceso a los colegios también serán claves para evitar contactos entre los escolares que puedan propiciar contagios.
Otro aspecto decisivo será el cierre de uno de los carriles de la Ronda da Muralla, que era una de las vías que más se saturaba en las horas de entrada y salida a clase. Ese hecho supone que parte del tráfico de la ciudad relacionado con los centros escolares deberá redirigirse hacia otras vías.
Al margen de avanzar que se trabaja ya en ese plan de tráfico, que este año tendrá especial importancia, la alcaldesa reivindicó ayer el trabajo de la Policía Local, que se diseña para garantizar la seguridad y la convivencia, teniendo en cuenta también las preocupaciones que transmiten los ciudadanos, aseguró.
