Los efectivos del Grupo Operativo Nocturno de la Policía Local de Lugo disolvieron el pasado fin de semana dos fiestas en domicilios particulares de la capital.
La primera intervención se llevó a cabo en la Rúa Rei Don García, donde los vecinos de un inmueble se quejaron del volumen de la música y del elevado tono de voz de los ocupantes de una vivienda, lo que les impedía conciliar el sueño. Los agentes acudieron al domicilio y los responsables se comprometieron a dejar de molestar al resto del vecindario, pero fueron denunciados por infracción a la Ordenanza de Protección Ambiental.
Los agentes del Grupo Operativo Nocturno se trasladaron igualmente a otra vivienda de la Avenida de Magoi, donde también hubo varias quejas vecinales. Una vez allí, los agentes comprobaron que se escuchaba "actividad humana en tono alto y el sonido de una guitarra", por lo que identificaron de inmediato al responsable del domicilio.
El chico explicó a los policías que se encontraba en compañía de dos compañeros de piso y que "no eran conscientes" de las molestias que estaban ocasionando. Al igual que en el otro caso, los ruidos cesaron con la intervención de los agentes.
