Efectivos del Grupo Operativo Nocturno de la Policía Local de Lugo disolvieron a lo largo del fin de semana dos fiestas juveniles que se llevaban a cabo en un piso de la Avenida de Madrid y en un bajo de un edificio de la calle San Roque.
En la primera intervención, a las 1.30 horas, los agentes detectaron a ocho personas no convivientes, que fueron denunciadas por infracción a la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana, con multas de 601 a 30.000 euros.
En la segunda fiesta, a las 2.20 horas, la Policía observó a diez jóvenes no convivientes en el interior del bajo. Según explicó el portavoz policial, los asistentes habían montado una mesa para las bebidas con un equipo de música y altavoces. Todos ellos fueron denunciados. Los agentes acudieron a estos lugares por las denuncias de los vecinos “debido al ruido que provenía de su interior y que imposibilitaba el descanso”.
Asimismo, 17 personas que se hallaban en estas fiestas salieron de los inmuebles y transitaron, sin justificación alguna, por la vía pública a partir de las once de la noche, por lo que también fueron denunciadas, por infracción a la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana, con multa de 601 a 30.000 euros.
Desde la Policía Local de Lugo recuerdan que, desde las doce de la noche del pasado día 4 "existe una limitación de permanencia de grupos de personas en espacios públicos o privados no superior a 4 personas, excepto que se trate de personas convivientes y en el caso de agrupaciones en que se incluyan tanto personas convivientes como no convivientes, el número máximo será también de 4 personas". Asimismo, "se mantiene la prohibición de circular por la vía pública entre las 23.00 y las 6.00 horas, sin hallarse incluido en ninguna de las causas de excepción que establece la normativa en vigor", concluyen.
