La Policía interviene en Camiño Real tras un aluvión de quejas por peleas

Los agentes acudieron a la zona varias veces durante el fin de semana tras recibir multitud de avisos. Los vecinos dicen que la situación "es grave" y recuerdan que hace tres meses "hubo tiros". Residentes reclaman que se revisen licencias

Coches patrulla de la Policía Nacional, el domingo por la noche en Camiño Real. XESÚS PONTE
photo_camera Coches patrulla de la Policía Nacional, el domingo por la noche en Camiño Real. XESÚS PONTE

La Policía Nacional se desplazó varias veces a lo largo del pasado fin de semana a la zona de Camiño Real tras recibir varias llamadas de vecinos que alertaban de «continuas pelas» en la vía pública.

Los residentes del barrio aseguran que los altercados nocturnos son constantes y se prolongan hasta bien entrada la mañana, ya que, según explican, algunos locales de la zona abren sus puertas «sin ningún tipo de control horario» y muchos clientes no tienen ninguna prisa por concluir la fiesta y regresar a casa. Creen que el Concello debe revisar las licencias de locales que no respetan los horarios.

Varios vecinos aseguran que una joven salió del bar un domingo y empezó a lanzar botellas contra la fachada del local

Los vecinos explican que la situación es cada vez «más grave» y temen que se complique todavía más. «El domingo por la tarde, una chica salió de un bar como loca y empezó a lanzar botellas a la puerta del establecimiento. Estaba fuera de sí y le podía haber dado a cualquiera que pasara por la zona, incluso a un niño», explicó un testigo.

Cuando llegó la Policía, la mujer estaba calmada y los responsables del establecimiento en cuestión le quitaron hierro al asunto. De hecho, según confirmó ayer el portavoz policial, la camarera del local les explicó que la joven estaba fumando dentro del bar, por lo que le pidió que saliera al exterior y ella se molestó, pero que no lanzó objetos contra la fachada.

La versión de los vecinos, sin embargo, es totalmente opuesta. «Siempre pasa lo mismo. Se monta follón y se forman peleas terribles entre los clientes, pero cuando llegan los agentes dicen que no pasa nada y ninguno quiere denunciar. La Policía viene, pero poco después se va porque no puede hacer nada. Como mucho identifican a varios clientes. Y los vecinos tampoco nos atrevemos a denunciar personalmente», reconocen, «ya que tenemos miedo a represalias».

La Policía sigue buscando a los autores del tiroteo ocurrido en febrero, que acabó con una mujer con un tiro en el estómago

Los afectados aseguran además que el ambiente que se respira en las inmediaciones de algunos locales es tan malo que la gente evita pasar por esa zona. «Estos altercados están afectando mucho a otros negocios, ya que la gente no quiere pasar por aquí porque le asusta lo que ve. Algunas veces, esto parece el Bronx», comentan.

Los vecinos piden al Concello que tome cartas en el asunto y comience a controlar a rajatabla los horarios de apertura de los establecimientos de hostelería más polémicos, a los que achacan los problemas de convivencia.

De hecho, en otras zonas de Camiño Real, lejos de estos locales, la percepción de los vecinos es distinta. «Antes era una calle conflictiva, pero ahora ya no hay tantos problemas. Todo eso bajó mucho. Ahora hay incidentes aislados en algún bar, pero nada más», apuntaba un residente.

TIROTEO. Los vecinos que el pasado fin de semana llamaron a comisaría recuerdan que, hace tres meses, los altercados en la zona alcanzaron tal magnitud «que hasta hubo tiros».

En aquella ocasión, a principios de febrero, una discusión por un asunto de drogas dentro de un establecimiento se trasladó a la vía pública. Uno de los implicados en la reyerta subió a un piso de la zona, cogió una pistola y bajó de nuevo. Ya en la calle, se la pasó a su amigo, que disparó seis tiros al aire.

En el transcurso del tiroteo, una mujer que participaba en la discusión recibió un disparo en el estómago. La Policía abrió entonces una investigación para tratar de determinar si el hombre que apretó el gatillo apuntó a la víctima de manera deliberada o si la bala alcanzó a la víctima de forma accidental.

La chica, natural de Lugo, fue trasladada al Hula, donde pronto se recuperó de sus lesiones, ya que la bala no le provocó heridas de gravedad. Tras el incidente, los agentes identificaron a dos hombres, también vecinos de Lugo, como presuntos responsables del tiroteo. La investigación por este asunto continúa abierta y los dos sospechosos siguen en paradero desconocido.

Los vecinos de Camiño Real temen que se vuelvan a producir trifulcas de este calado y exigen más actuaciones en una zona «que se está quedando totalmente marginada», concluyen.

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