Juan González Soler: "No podemos permitir ni un contrato más de tres o seis meses"

El Hula recibe este viernes a más de 200 internistas para participar en la reunión anual de la Sogami, foro en el que el doctor González Soler se convertirá en presidente. Es un momento delicado para la especialidad, con profesionales exhaustos, muchos jóvenes con contratos precarios y una negociación abierta con Sanidade para mejorar condiciones de trabajo
Juan González Soler, vicepresidente de la Sociedad Gallega de Medicina Interna. EP
photo_camera Juan González Soler, vicepresidente de la Sociedad Gallega de Medicina Interna. EP

El doctor gonzález Soler, adjunto en Medicina Interna del Chuo, se convertirá en horas en el representante de 460 internistas gallegos, sumidos en negociar con la Consellería la mejora de las condiciones laborales. En esta entrevista repasa algunas medidas propuestas.

En el documento de posicionamiento de la Sogami se habla del incremento de la demanda asistencial que ha asumido Medicina Interna, con el envejecimiento de la población y cronificación de patologías, y se recuerda que los pacientes con covid ingresan desde hace dos años, y siguen haciéndolo si ese es el motivo del ingreso, en Interna. ¿Por qué surge ahora esta protesta de los internistas?

Nosotros, en Ourense, llevamos años denunciando la ausencia de una política de recursos humanos y una falta de dimensionamiento de la plantilla, pero es verdad que en otros hospitales estaban en mejor situación, aunque casi todos con déficit de profesionales. Ha habido salida de internistas jóvenes a la sanidad privada porque ofrecía contratos más atractivos que los del Sergas. Ha habido una mala planificación sanitaria en los últimos diez años. Llevamos ese tiempo diciendo que se estaban jubilando muchos médicos y que llegaría un momento en que no tendríamos suficientes. En lugar de ir aumentando las plantillas o dimensionándolas lo que se ha ido haciendo es reduciéndolas, por lo que se ha llegado a una situación insostenible. Durante el covid, la hospitalización ha recaído en muchos hospitales completamente sobre Medicina Interna, y ha sido la puntilla para estos servicios, donde ha habido médicos con problemas de salud laboral, estrés.... Ha llegado un momento en el que no hemos dado abasto y tenemos una sobrecarga en el número de pacientes que tenemos que valorar a diario que triplica el recomendable por los estándares que permiten cosas con garantías.

¿Cuál es ese estándar?

Entre 8 y 10 pacientes en planta de hospitalización convencional por día. Así es como una plantilla es más eficiente, pero nosotros hemos llegado en muchas ocasiones a tener 18 pacientes. Han saltado en estos momentos todas esas reivindicaciones porque consideramos que se está poniendo en riesgo la atención a esos pacientes.

¿Cuántas vacantes de Medicina Interna hay en Galicia y dónde?

No tenemos el dato, pero sí tenemos otro que dio el conselleiro recientemente, que dijo que había en estos momentos 253 internistas contratados. Lo aportó como diciendo que había muchos internistas en Galicia, cuando los datos del ministerio de 2011 hablaban de una plantilla de 283. Es decir, hace 11 años había 30 internistas más en Galicia de los que hay ahora. A pesar de que cada vez hacemos más actividad, cada vez somos menos. Durante años se ha invertido en otras cosas, incrementando las especialidades más específicas, en vez de reforzar la Atención Primaria, la Medicina Interna... las especialidades más polivalentes, que son el tronco del sistema sanitario. En mi opinión es una política errónea. Han tenido servicios que se han ido hipertrofiando y es como si tuvieras las ramas hipertrofiadas con un tronco muy endeble, con lo que en estos momentos el sistema sanitario se está tambaleando. Hay muchas interinidades que no se han cubierto. Seguimos teniendo muchos compañeros internistas a los que se hace contratos cada tres meses y que llevan encadenando ese tipo de contratos desde hace tres, cuatro o cinco años, cosa que en la empresa privada no ocurre por ley. Es la administración la que no cumple la ley.

En toda España se está sufriendo el mismo problema de falta de perso nal en los hospitales comarcales. ¿Cómo explicaría a los pacientes de esos centros por qué es tan difícil encontrar profesionales que quieran ejercer en ellos?

No todos tienen problemas para cubrir sus plantillas. Probablemente los más alejados de los núcleos grandes son los que tienen esa dificultad.

En Ourense, O Barco, y en Lugo, Burela, por ejemplo.

Estos hospitales son fundamentales y ahí el internista tiene un papel primordial. En estos momentos, como no se ha planificado bien y hay déficit de médicos en todas partes, la gente que termina elige dónde quiere trabajar. Las condiciones de los comarcales son semejantes a las de un hospital central y piensan que se pueden desarrollar mejor en uno central, cosa que yo creo que no siempre es así. Pero eso ha llevado a tener más dificultades de cubrir las plazas en los hospitales comarcales, que son fundamentales en una red sanitaria como la gallega.

La consellería propone ahora para dar cobertura a los comarcales un contrato de 6 meses con la obligatoriedad de pasar un mes en este tipo de hospitales, frente al inicial de un año con hasta 4 meses en ellos, ¿les satisface esa medida?

No, no va a resolver el problema. Puede paliarlo parcialmente pero hay que dar más pasos. En comunidades como la manchega están ofreciendo contratos de cuatro años a los internistas cuando terminan. Formar un internista es muy caro, así que después de formarlos no tiene sentido hacerles contratos de seis meses cuando sabes que los necesitas. Tendrás que fidelizarlos y ofrecerles buenas condiciones. Ese contrato vuelve a quedarse escaso. Para que la gente quiera irse a O Barco o a Burela tendrás que ofrecerles un contrato indefinido o de tres años, pagarles bien y decirles que, en cuanto lleven allí dos o tres años, podrán entrar en un concurso de traslados si quieren entrar en un hospital central. Eso para los centros comarcales pero también hay problemas en los centrales y no podemos permitir ni un solo contrato más de tres meses o de seis meses.

¿Y la incentivación económica de esos puestos en las comarcales o la cobertura de esas plazas con concursos de méritos, como se hizo en Primaria, qué opinión les merece?

La Sogami tuvo una reunión previa con el gerente del Sergas y el conselleiro y justamente esa fue una de mis preguntas. Una vez que se ha dado ese plazo en Primaria, ¿por qué en plazas especialmente carenciadas como las de O Barco, no se oferta una Ope extraordinaria o unas plazas en propiedad con unos condicionantes como los de estar tres o cuatro años y el acceso por concurso de méritos? He leído que ya lo están barajando y desde luego es mucho más atractivo que un contrato de seis meses con uno de movilidad. Es un paso que tiene que ir acompañado de otros. Además del concurso de méritos para tener esa plaza en propiedad en un comarcal, al médico que lleva años trabajando sin contrato fijo hay que ofrecerle un contrato fijo. El problema es global, no se puede centrar solo en los comarcales. Tienes que hacer un planteamiento serio porque necesitas a todos los médicos, a los que acaban ahora y a los que llevan años encadenando contratos de seis meses, a todos, no puedes permitirte perder a ninguno.

"Es impensable movilizar al médico a donde quieras"

Esta idea del Sergas del hospital único supone que se podría hacer un nuevo contrato de internista en su hospital de Ourense, por ejemplo, pero si fuera preciso ese profesional podría tener que cubrir una guardia en cualquier otro centro gallego, Ferrol por ejemplo. Pero eso no afectaría a los veteranos con plaza. ¿No produce inequidad entre profesionales?

Sí, mucha. En el caso de Ourense, no, porque decidimos que si alguien tenía que ir íbamos todos. Yo soy veterano y con plaza en propiedad y voy a hacer guardias a O Barco. Eso sí, obligado. La dirección me firma un papel y me dice que tengo que ir allí. Eso ya está pasando en algún hospital como el de Ourense pero no en otros y por eso Ourense ha sido el primer hospital que salió protestando y ha liderado un poco las quejas. Lo del hospital único puede tener un sentido. Una cosa es que a alguien le ofrezcas un contrato de dos o tres años en un hospital y otra que los uses el fin de semana para movilizarlos a donde tú quieras. Eso es impensable porque entonces sí que se van, o nos vamos, todos.