Las piscinas de Frigsa abren gratis ante el calor y la falta de playa fluvial

La alcaldesa y el delegado de la Xunta continúan polemizando sobre la responsabilidad de que la ciudad siga sin zona pública de baño en el río Miño
La alcaldesa, con los concejales Mauricio Repetto y Miguel Fernández, en Frigsa. EP
photo_camera La alcaldesa, con los concejales Mauricio Repetto y Miguel Fernández, en Frigsa. EP

El Concello anunció que las piscinas descubiertas de Frigsa serán gratis este mes para facilitar a los ciudadanos que se refresquen ante las altas temperaturas que están caracterizando a este verano y la falta de zona pública de baño acondicionada en el río Miño.

Las piscinas de Frigsa abren de lunes a viernes de 12.00 a 20.30 horas y los sábados y domingos de 12.00 a 20.00. Disponen de dos socorristas durante toda la jornada y de tres en las horas de más afluencia. Hay tres vasos con distintas profundidades, para distintas edades.

La alcaldesa, Lara Méndez, insistió este jueves en que la negativa de la Xunta a autorizar la instalación de las piscinas flotantes en el río es una decisión que los ciudadanos no entienden porque considera que la Xunta había dado su aval en un primer momento, aunque este estaba condicionado a que se comprobase que no había especies protegidas.

Méndez critica que la Xunta rechace también la ubicación que el Concello propuso como alternativa, unos 40 metros más arriba. Asegura que los estudios aportados demuestran que hay caudal suficiente y pocos mejillones,  pero la Administración autonómica discrepa y, en base a los datos aportados por el Concello, sostiene que la densidad de bivalvos sigue siendo alta y que los estudios de calado no garantizan que "nunha seca grande" las piscinas no lleguen a tocar el fondo. 

El delegado de la Xunta, Javier Arias, criticó también este jueves que el Concello lleve hablando de la playa fluvial desde 2010 y no hiciera los muestreos en el río hasta este junio, justo antes del inicio de la colocación de las piscinas flotantes. El gobierno local replicó a esto que hizo muestreos en distintos momentos y también este junio, porque así lo exigía el departamento ambiental de la Xunta en su informe de 2019, en el que condicionaba la autorización de la zona de baño al cumplimiento de una serie de requisitos. Entre ellos, demostrar cada año antes del montaje de la estructura flotante que no hay afección a especies.

Arias, por su parte, mantiene que el informe desfavorable de la Xunta "no es un capricho" e insiste al gobierno local en que explore otras ubicaciones que "están libres de especies", que suelen coincidir con zonas que tienen más agua y más estancada. 

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