El Boletín Oficial de la Provincia publicó este lunes el bando de la alcaldesa, Lara Méndez, que permite la instalación de elementos de protección en las terrazas de los negocios de hostelería de Lugo.
El bando establece, por ejemplo, que las terrazas podrán cerrarse lateralmente hasta un máximo de tres cuartas partes de su perímetro, que deberán ser de materiales transparentes o traslucido que no podrán anclarse al pavimento y que deberán garantizar la adecuada ventilación entre los cierres laterales y el superior.
Los hosteleros lucenses se gastarán entre 3.500 y 15.000 euros en cubrir las terrazas
Estas medidas fueron fruto de una negociación entre el Concello y la Asociación Provincial de Empresarios de Hostalería e Turismo de Lugo. Entre ellas, también figura que la cobertura superior de las terrazas solo podrá hacerse con toldos, sombrillas o elementos similares que aguanten la intemperie, según el bando, y todos los elementos de cierre deben un color homogéneo.
El Ayuntamiento advierte de que la instalación de elementos de protección en las terrazas va acompañada de la obligación de respetar las condiciones de uso, aforo y proporción de espacios establecidos por las autoridades sanitarias.
La instalación de sistemas de protección de las terrazas, advierte, tiene carácter excepcional y temporal y se mantendrá en vigor mientras continúen las restricciones a los negocios de hostelería.
Para instalar los elementos de cierre de las terrazas, los hosteleros deberán presentar en el Ayuntamiento una declaración responsable, en la que el hostelero detalle que los elementos de cobertura que va a utilizar cumplen las condiciones establecidas en el bando municipal.
El Concello recordó que esta medida excepcional busca proporcionar un mayor confort a los clientes, ante el aumento de la demanda de uso de las terrazas. Además, la medida se acompaña de la decisión de no cobrar las tasas de las terrazas tampoco durante el año 2021, como medio para ayudar a paliar la consecuencias de la crisis provocada por el covid.
Desde el inicio de la pandemia, el sector de la hostelería ha sido especialmente castigado por la crisis y los negocios han soportado ya dos periodos prolongados de cierre total y otro de apertura solo hasta las cinco de la tarde.
El ocio nocturno sigue viéndose afectado por las medidas restrictivas, ya que se mantienen los límites horarios y el toque de queda a las once de la noche. Como compensación, en Lugo se permitió ocupar espacios públicos de calles y plazas para colocar terrazas.
