Queda mucho aún para poder ver la estación intermodal de Lugo, para la que ni siquiera se barajan plazos, pero el proyecto acaba de avanzar un paso al aprobar la Xunta la modificación del PXOM para descatalogar el edificio de Correos, todavía en uso, y poder derribarlo.
La Dirección Xeral de Patrimonio autorizó este trámite después de que el Concello justificara que, al contrario de lo que sucede con el edificio de viajeros, la edificación de Correos no tiene mayor valor y que fue catalogada por error en el PXOM.
No obstante, para que las máquinas empiecen a tirar este edificio y a construir la nueva terminal falta por salvar un escollo mucho mayor, el de quién financiará el párking subterráneo que va asociado a este proyecto. Adif cree que la Xunta debe contribuir, como lo ha hecho en otras intermodales gallegas, porque la infraestructura beneficiará tanto a los viajeros de autobuses como a los de tren y a que Adif ya pone los terrenos y que, por tanto, los gastos deben compartirse.
La Xunta, en cambio, propone que sea el Gobierno central quien financie el aparcamiento con los fondos europeos de reconstrucción tras el covid. Es la última propuesta que hizo, después de ofrecer aportar el 10% del coste o de que el párking se haga en superficie. Adif considera que esta última opción no es viable porque no hay suficiente terreno para ello. De hecho, el proyecto diseñado por Adif contempla que la estación de autobuses que construirá la Xunta a continuación de la del tren, hacia Paradai, se haga encima del párking subterráneo.
El proyecto de la estación de tren y de la plaza aledaña está bastante avanzado desde hace tiempo, mientras que la Xunta trabaja en el de la estación de autobuses. Sin embargo, la falta de acuerdo económico para financiar el aparcamiento sigue impidiendo la firma del necesario convenio entre las tres administraciones implicadas, Adif, Xunta y Concello.
El planeamiento urbanístico de la ciudad exige que una dotación como la estación intermodal tenga párking, de modo que su construcción es obligatoria.
En marzo del año pasado, la entonces presidenta de Adif, la lucense Isabel Pardo de Vera, manifestaba la voluntad de avanzar en solitario en el proyecto ferroviario, en la parte que le compete, si no había acuerdo con la Xunta para el párking. Sin embargo, no consta que haya habido avances. Este jueves, la Xunta explicaba que, a la vista de los Presupuestos Generales del Estado para el año 2022, interpreta que Adif asume el gasto del aparcamiento. Para 2022 se prevé una partida de 5 millones de euros, de un presupuesto total de 38,5 millones hasta 2025, "por lo que se entiende incluida la financiación del aparcamiento por parte del Gobierno".
Correos: un edificio que aún está en uso
Correos sigue utilizando por el momento sus instalaciones del barrio de A Estación. Allí tiene dos unidades de trabajo, la de servicios especiales, que se encarga del reparto de paquetería, y una unidad de servicios rurales, que se encarga de repartir los envías a las parroquias del municipio y de otros concellos limítrofes.
TRASLADO. Correos no informa de momento de cuál es su plan para trasladar los servicios de A Estación cuando llegue el momento de derribar el edificio que los acoge en este momento.
ESTACIÓN DE BUSES. La Xunta prevé una terminal de 550 metros cuadrados, con dos plantas y 23 dársenas. De las dos plantas proyectadas, la baja será de espacios diáfanos, con zonas de atención a los viajeros y cafetería. El piso superior se dedicará a usos administrativos e instalaciones de la gerencia de la terminal de viajeros. Recientemente, la Xunta dejó abierta la posibilidad de dejar un punto de parada de los buses en el centro, en la zona de la actual estación.
ESTACIÓN DE TREN. Adif también tiene bastante definido el proyecto de la terminal de tren y del entorno, que incluye un paso bajo las vías férreas para comunicar el Sagrado Corazón con el centro de la ciudad.
