Los novios suelen ser los protagonistas de los enlaces nupciales, pero este viernes esa relevancia recayó en los peculiares padrinos del evento. Tamara Otero, que es natural de A Pontenova, y Diego Rois, que es de Lugo, no quisieron que sus fieles e inseparables compañeros, sus mascotas, se perdieran su boda civil, que se celebró en la casa consistorial de la capital lucense.
Diego estuvo escoltado por Simba —el mismo nombre que el del protagonista de la trilogía El rey león— , un husky que aún no ha cumplido un año. Y a Tamara la acompañó Nala —la mejor amiga de Simba en estas películas de animación—, una perra de seis años de raza labrador.
"Estamos muy unidos a nuestros perros y no podíamos celebrar la boda sin contar con ellos", afirmaba Diego, que explicaba que, tras cinco años de noviazgo, se decantaron por el Concello de Lugo para celebrar la boda porque querían que "fuese algo especial, no una simple firma en un juzgado". Tamara bromeaba diciendo que sus perros eran "los padrinos".
Cuando la pareja esperaba, a media mañana, en la céntrica Praza Maior, a la espera de entrar en el consistorio, más de un lucense aprovechó para retratarlos con sus teléfonos móviles al lado de sus canes.
Un grupo de escolares que pasó delante de la pareja les gritó 'Que vivan los novios'
Los dóciles animales también hicieron las delicias de un nutrido grupo de escolares del colegio Divina Pastora-Salesianos, que estaban de excursión, que no se contuvieron y entonaron el tradicional "Que vivan los novios" cuando pasaron frente a la pareja.
La alcaldesa, Lara Méndez, que salía de la casa consistorial camino de un acto público, también se acercó a saludar a los novios y a sus mascotas.
La sala de plenos del consistorio acogió el enlace entre Tamara y Diego, en el que actuó como oficiante la concejala de Desenvolvemento Local e Emprego, Ana González Abelleira. La pareja se va a Roma de luna de miel.