Un paciente agredió a una psiquiatra en Calde que sufrió una herida en la cabeza

Víctima, que precisó varios puntos de sutura, y agresor, que fue ingresado en la unidad de Psiquiatría, fueron trasladados al Hula
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photo_camera El Hospital de Calde, especializado en atención psiquiátrica. AEP

Una psiquiatra fue agredida ayer por un paciente que estaba ingresado en el Hospital de Calde de Lugo. La facultativa, que sufrió una brecha en la cabeza, fue evacuada en ambulancia al Hula, en donde le tuvieron que aplicar varios puntos de sutura.

La agresión tuvo lugar alrededor de las once de la mañana en  una de las habitaciones de la unidad de cuidados especiales del Hospital de Calde, cuando la psiquiatra pasaba consulta.

Entonces el paciente empujó o le propinó un puñetazo a la médica, según varias versiones recabadas. Debido al impacto esta se cayó y se golpeó contra el carro de los medicamentos, lo que le ocasionó una brecha en la cabeza.

Esta unidad de cuidados especiales, que dispone de 24 camas, de las que actualmente están ocupadas 14, es donde se encuentran los internos que pueden manifestar un comportamiento más agresivo.

El enfermo que protagonizó este episodio violento, un joven corpulento de cerca de 1,90 metros de estatura, se encerró en su habitación. Para poder inmovilizarlo fue precisa la intervención del único vigilante de seguridad privada con que cuenta el Hospital de Calde y de otros dos que acudieron de refuerzo.

El agresor, un joven corpulento de casi 1,90 metros de estatura, tuvo que se inmovilizado por tres vigilantes de seguridad privada y fue sedado

Tras ser reducido, los sanitarios le administraron al interno un inyectable con el fin de sedarlo. Entonces fue trasladado en una ambulancia, bajo vigilancia, a la unidad de Psiquiatría del Hula, en donde están ingresados los enfermos agudos.

Este incidente ha puesto de nuevo de manifiesto, por una parte, la inseguridad que sufre el personal sanitario, que con relativa frecuencia es víctima de agresiones por pacientes o por sus familiares.

Y por otra parte evidencia que se precisa más plantilla de seguridad en este hospital de las afueras de la capital lucense, pues solo hay un vigilante, las 24 horas del día, para este centro que cuenta con más de 60 pacientes y que tienen patologías que pueden derivar en comportamientos agresivos.