Once de los trece médicos de Familia que acaban ahora su residencia en el área sanitaria de Lugo continuarán ejerciendo en la provincia. Nueve de ellos lo harán en distintos centros de salud, mientras que otro lo hará en Urgencias hospitalarias y otro más en el 061. La gerencia ofreció contratos a todos los residentes de Familia, una de las especialidades de la que se percibe en los últimos años más falta de personal.
El Hula acogió este martes el acto de despedida, al que acudieron además de los 13 nuevos médicos de cabecera, los 20 formados en los distintos servicios del hospital. Todos acabarán oficialmente su período formativo el día 20 y está previsto que el 28 se incorpore la nueva hornada de residentes.
La celebración contó con la actuación de Manuel Muinelo, cirujano del Hula, a la guitarra, la voz de la cirujana Gisela Navarro Queirós y la traumatóloga Laura Coto Caramés a la pandereta, que interpretaron una particular versión de Rianxeira, en la que los que vienen y van, en vez de ser las oliñas fueron los resis del hospital lucense y que fue ampliamente compartido durante todo el día en redes con la etiqueta de Himno de los MIR del Hula.
El médico de Familia del centro de salud de Burela Carlos Fernández Fraga fue el encargado de dar un discurso como veterano tutor de residentes, en el que repasó sus casi tres décadas ejerciendo esta labor formativa.
