La obra que financia la Xunta en la catedral y que permitirá recuperar ventanas románicas que permanecían tapiadas ya está en marcha.
Los trabajos, aprobados el pasado mes de noviembre, se enmarcan en el proyecto de acondicionamiento de la planta bajocubierta situada encima de las antiguas sacristías de las capillas del Pilar y de San Froilán y también sobre esta última capilla.
La obra permitirá despejar las ventanas y abrir lucernarias en la cubierta. Las ventanas, situadas en los muros de la nave lateral, dan al Museo Diocesano y al triforio.
Los trabajos, que tienen un plazo previsto de cuatro meses, permitirán también dotar de un almacén al Museo, para custodiar obras que no están en exposición.
La intervención, proyectada por el arquitecto José María Alonso Montero, permitirá también la impermeabilización de esa zona de las cubiertas, en la que no se actúa desde hace 50 años y donde no hay ni electricidad.
