Eduardo Núñez Torrón dejó la gerencia del centro comercial Abella tan solo un día después de que se anunciara su nombramiento.
La decisión de Núñez Torrón de apartarse del proyecto se conoció en una jornada que fue turbulenta en el centro comercial, si bien arrancó con el anuncio por parte del Concello de que las instalaciones pasaron la tercera inspección y «parece que está todo correcto», según Miguel Fernández, portavoz del gobierno local.
Tras la revisión, los técnicos del Ayuntamiento están redactando su informe definitivo y, según lo apuntado por Fernández, una vez que se entienda que se cumplen todos los requisitos el centro comercial podrá recibir los permisos de funcionamiento que estaban pendientes y que han dado lugar al cierre de varios de los negocios que funcionaban en el inmueble.
El mensaje que apunta a la definitiva y completa legalización del centro enviado ayer desde el Concello no evitó, sin embargo, que el día fuera turbulento en el centro comercial, dado que los dueños de La Fundación, que cerraron recientemente su local, acudieron a llevarse material del establecimiento. La situación derivó en una llamada a la Policía, que no intervino finalmente.
La Fundación es uno de los locales que cerró en Abella argumentando que la falta de licencia del centro comercial era un obstáculo definitivo para el desarrollo de cualquier actividad comercial allí. Los negocios, al no estar legalizados por una licencia, no están tampoco cubiertos por los seguros que contrataron, de forma que podrían encontrarse con un problema serio en el caso de que un cliente sufriera un accidente, alegaron empresarios que cerraron sus negocios.
