El número total de mascotas en Lugo casi triplica al de niños entre los 0 y los 10 años

Con 22.268 animales, la capital lucense es la tercera ciudad gallega con más inscripciones en la Xunta, detrás de Vigo y A Coruña
Renata Amado, en su peluquería y boutique, con uno de sus clientes. XESÚS PONTE
photo_camera Renata Amado, en su peluquería y boutique, con uno de sus clientes. XESÚS PONTE

Los números no engañan. Actualmente, la cifra total de mascotas en Lugo municipio casi es tres veces más que la de niños de 0 a 10 años. El Rexistro Galego de Identificación de Animais de Compañía, Regiac, tenía –a fecha del pasado día 17– un total de 22.268 animales inscritos. El padrón municipal contabilizaba –también ese día– tan solo 8.568 niños, menores de 10 años.

Tener una mascota en casa es una tendencia que se afianzó especialmente en la última década e, incluso, se impuso tras la pandemia del covid. Volviendo a los datos estadísticos, en 2012 se contabilizaban en Lugo casi 7.000 mascotas. En 2019, esta cifra ya era más del doble y se acercaba a las 17.000. En 2022, y con la pandemia de por medio, el número de animales de compañía siguió subiendo y supera los 22.000, lo que es tres veces más que hace diez años.

El fenómeno no es exclusivo de Lugo. A medida que el número de nacimientos apenas crece, aumenta casi exponencialmente la presencia de mascotas en los domicilios. Esta tendencia es general pero, de todas formas, Lugo se sitúa entre las tres principales ciudades de Galicia con mayor presencia de mascotas, solo superada por Vigo –que ocupa el primer puesto, con 51.752 animales– y A Coruña, en segundo lugar con 34.109 en total.

Entre los tipos de mascotas más habituales, los perros se llevan la palma en los hogares lucenses. Hay, actualmente, casi 21.000 (20.918). Los siguen, muy por detrás, los gatos (1.288). El resto de los animales inscritos son 25 hurones y otros, no especificados, que suman un total de 37.

Este bajo número de felinos quizás no se adecue a la realidad ya que suele haber menos registros de gatos que de perros. Sin embargo, las inscripciones de gatos en el Regiac crecieron todavía mucho más de forma exponencial en Lugo, en los últimos diez años, que las de perros pasando de los 88 que había en 2012, a los 518 de 2019 y los 1.288 de 2022. 

La creciente presencia de animales de compañía en los hogares se extiende también al resto del país. Según el Estudio de Mascotas –realizado el año pasado por la Asociación Empresarial Española de la Industria de la Nutrición y Sanidad Animal (Veterindustria) en colaboración con la Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos para Animales de Compañía (Anfaac)–, la mitad de las familias cuentan con un animal de compañía y su número aumentó también de manera significativa respecto a 2019, antes de la pandemia, cuando los hogares con mascotas, a nivel estatal, eran cuatro de cada diez. El estudio habla de un censo de más de 29 millones de animales en toda España.

Más negocios de mascotas

Estos números repercuten también en términos económicos. Cada vez surgen más negocios alrededor de las mascotas, cuyos dueños ven más necesidades en torno a su cuidado, que no solo se limita a la alimentación y a la atención veterinaria.

Renata Amado es la gerente de Ecolavakan, una peluquería y boutique canina donde los dueños llevan a sus perros para ponerlos guapos y vestirlos a la moda.

"Aquí tenemos chubasqueros, jerséis, cosméticos, perfumes, champús... y también tenemos un estudio fotográfico canino para la gente que quiere tener un recuerdo de sus mascotas", aclara Renata Amado.

En Ecolavakan, se reciben las últimas tendencias en moda canina. "Siempre hay colecciones nuevas de ropa cada año", indica. Lo último que llegó a su tienda fue un abrigo impermeable. "Lo más habitual son las capas pero ahora salió un abrigo impermeable que se cierra por completo, como una chaqueta, y los perros van mucho más abrigados en invierno", comenta Renata Amado.

El precio de cada prenda puede rondar los 30 euros. "Lo más barato es un impermeable, que cuesta unos 25 euros", dice Renata.

También hay una gran variedad de champús: para pelo blanco, para pelo negro, para pelo liso e, incluso, vegano. "Un champú vegano sale por 7 euros", señala la gerente de Ecolavakan, que añade que también hay cremas hidratantes, mascarillas y perfumes. 

Renata Amado cogió este establecimiento como un traspaso hace ocho años. Venía de Brasil y se encontró en Lugo con un mercado de cuidados de mascotas todavía muy incipiente. "Observé que apenas se vendía ropa para los animales de compañía y, entonces, en un viaje que hice a mi país decidí traer más de 1.000 piezas de Brasil y lo vendimos todo en pocos días", cuenta.

El negocio de la peluquería también va viento en popa. Lo habitual es que cada cliente pase por su salón cada dos o tres meses. Si de lo que se trata es de bañarse, los clientes suelen ir cada quince días o cada mes. "Si tienen el pelo corto, el servicio puede costar 15 euros", apunta la gerente de Ecolavakan, que también arregla las uñas de los animales que acuden a su establecimiento.

Gastos: una media mensual que ronda los 100 euros

Tener un animal de compañía puede aumentar los gastos mensuales en 100 euros. O, lo que es lo mismo, unos 1.200 euros al año, lo equivalente al sueldo medio mensual . Esta cifra la comparten tanto Veterindustria como la Real Sociedad Canina de España.

De estos 100 euros, se calcula que en alimentación se pueden ir 70. El resto pueden ser gastos de veterinario. Hacer frente a los gastos obligatorios como vacunas, microchips o la desparasitación cada tres meses oscila entre los 80 euros y 200 euros anuales.

A la comida y el veterinario, se le suman otros gastos como accesorios, ropa (tanto para la cama como para protegerse del frío o de la lluvia), juguetes, chucherías, arneses o material para comer.

Entre tanto, el Estudio de Mascotas de Veterindustria indica que el cuidado de mascotas (perros y gatos) generó una facturación global en España de 376 millones de euros en 2021, lo que supuso un aumento en unos 50 millones de euros con respecto al año anterior, 2020, cuando todo el volumen de negocio relacionado con el cuidado de mascotas sumó 328 millones de euros.

Un cementerio, el año que viene
El Concello de Lugo abrirá un cementerio para mascotas el año que viene, en los aledaños del camposanto de San Froilán. Allí se podrán llevar los restos de todo tipo de mascotas, que deberán ser incineradas.

Para optar a este servicio, se pagará una tasa, cuya cuantía dependerá del servicio (si es enterramiento o esparcimiento de cenizas en un espacio para ese fin). El Concello acometerá en breve la contratación del proyecto.

Convivencia: esos parientes con pelo y plumas

Leticia Villares, con Dalma. VICTORIA RODRÍGUEZ
Leticia Villares, con Dalma. VICTORIA RODRÍGUEZ

La vida de Leticia Villares no sería la misma sin Dalma, su perra, que la acompañó los últimos catorce años. "Sempre fun de gatos pero viñen a vivir soa a Lugo e comíame a casa. Entón coincidiu que a cadela de meus pais quedou preñada e decidín levar unha cachorra, que foi Dalma. Desde aquela, estivo sempre comigo", explica Leticia, que antes de tener a Dalma tuvo una gata a la que, incluso, le llegó a pagar un piso en alquiler dado que su pareja tenía un perro y la convivencia entre los dos animales era un problema.

El cariño y el apoyo emocional que dan compensan el desembolso económico y los cuidados que conlleva

Leticia descubrió con Dalma la compañía que dan los perros. "Os gatos non dan ese recibimento de ledicia cando chegas á casa! Agora ten xa 14 anos e o ano pasado tivémola que operar a vida ou morte pero, ata ese momento, viaxabamos xuntas, buscabamos hoteis que admitisen mascotas principalmente fóra de Galicia (porque aquí hai poucos), ibamos á neve e á praia xuntas, ibamos dar voltas á muralla, ibamos de bares e restaurantes... Foi e é unha compañeira de vida cen por cen. Dáme paz, serenidade... é a miña vida", explica.

Los propietarios de animales de compañía aseguran que, para ellos, son unos miembros más de su familia

Leticia reconoce que mima a su perra. Le da una alimentación específica por sus problemas de salud, le compra chucherías para perros y la lleva a la peluquería una vez al mes donde también le limpian los oídos y la boca y le cortan las uñas además de ponerle unas coletitas con lazos en la cabeza. Pero no es lo único: el armario de Dalma está tan completo como el de su dueña. "Ten máis roupa de abrigo ca min. Ten sueiras, plumíferos, petos, camisetas e tamén temos algunha prenda igual eu e ela", explica con orgullo, a la vez que muestra su figura tatuada en un brazo.

Arca de Noé: once gatos, cinco perros, cuatro gallinas y un gallo

Carme Aira, con Larafuzas. EP
Carme Aira, con Larafuzas. EP

La vida de Carme Aira cambió totalmente desde que es parlamentaria autonómica por el BNG. Su cargo la lleva, varios días a la semana, a salir de casa a las ocho de la mañana rumbo a Santiago y no retornar hasta las diez de la noche. Pero cuando vuelve, no se siente sola. La espera su familia, compuesta por un arca de Noé: once gatos, cinco perros, cuatro gallinas y un gallo, Telmo.

Desde fuera, convivir una sola persona con todos estos animales puede parecer de locos pero Carme lo lleva bien y, es más, agradece su compañía.

"Dan moita confortabilidade e un afecto moi grande. Fan moita compañía, ¡mesmo as pitas! Para min, son unha familia alternativa e a algarada que forman cando chego á casa vale un tesouro, iso é superconfortante", comenta.

Unos 300 euros al mes es el coste estimado que le supone a la diputada del BNG ocuparse de su familia animal, pero no le importa.

"Sempre hai gastos. Os cans e os gatos téñoos esterilizados e tamén atendo os gatos dunha veciña, que agora foi para unha residencia. E, polo demais, merco o penso nun almacén, que sae mellor e máis barato, e no supermercado, algo de comida húmida. En comida, poden ser 150 euros ao mes. Tamén, dúas veces ao ano, hai que desparasitalos, o que pode ser outros 150", cuenta.

Organizarse para atenderlos a todo puede ser complicado pero Carme lo tiene bien organizado. "Os gatos son autónomos. Só hai que darlles de comer e limparlles a area. E cando vou a Santiago, doulles de comer máis cedo pola mañá e máis tarde pola noite", dice la diputada.

Comentarios