El Tribunal Supremo no admitió un incidente de nulidad presentado por la jueza Pilar de Lara —instructora de numerosos importantes casos en Lugo, suspendida por irregularidades y ahora en Ponferrada— después de que el alto tribunal ratificase el pasado mes de mayo la sanción de siete meses y un día que le impuso en su día el CGPJ y que ya cumplió. Además, le impone las costas de este proceso: un total de mil euros.
De Lara, tras conocer el fallo del Tribunal Supremo que confirmaba la sanción, decidió presentar un incidente de nulidad de actuaciones al entender que la sentencia "conculcó su derecho fundamental a una tutela judicial efectiva por incongruencia omisiva" (cuando el Tribunal deja de dar respuesta a cuestiones jurídicas oportunamente planteadas).
Según De Lara, el tribunal no se pronuncia sobre una cuestión de inconstitucionalidad en relación "a la vulneración del artículo 6 del Convenio Europeo de Derechos Humanos".
El Supremo le responde que sí lo responde y no admite el incidente de nulidad.
