Una nonagenaria alertó a bastonazos de que precisaba ser rescatada en su casa

Quedó encajonada de madrugada entre la ducha y el inodoro ► Los policías que la auxiliaron la hallaron además a oscuras
Calle Campos Novos, donde se registró el incidente. AEP
photo_camera Calle Campos Novos, donde se registró el incidente. AEP

La Policía Local auxilió de madrugada a una mujer de 97 años que se quedó encajada entre la ducha y el inodoro de su baño y no era capaz de moverse. La nonagenaria comenzó a dar golpes en el suelo con su bastón para pedir ayuda y consiguió que sus vecinos la escucharan y alertaran a las fuerzas de seguridad.

Los hechos sucedieron en la noche del sábado al domingo, alrededor de las cuatro de la madrugada, cuando la Sala del 092 movilizó a una patrulla para que se trasladara a un domicilio de la calle Campos Novos, ya que se escuchaban golpes procedentes de un domicilio en el que residía sola una persona de avanzada edad, por lo que los ruidos podrían ser una señal para pedir auxilio.

Los agentes acudieron de inmediato al inmueble y escucharon claramente los golpes, por lo que accedieron al interior y se encontraron a una mujer de 97 años en el baño de la vivienda, completamente a oscuras. La anciana tenía encajado un pie entre la ducha y el inodoro y estaba atrapada. Los policías auxiliaron a la mujer y consiguieron liberarla. Además, tal y como señaló ayer el portavoz policial, comprobaron que no había luz en toda la casa, «ya que los limitadores de corriente eléctrica estaban bajados, así que los accionaron, volviendo a tener luz la vivienda», explicaron.

Tras comprobar que la anciana no necesitaba asistencia médica, la Policía Local dio por finalizada su intervención y puso los hechos en conocimiento de los servicios sociales del Concello.

Ese mismo día, sobre las seis menos cuarto de la mañana, los agentes del Grupo Operativo nocturno se desplazaron a otra vivienda de la Rúa Montero Ríos, ya que una persona de avanzada edad había sufrido una caída en el cuarto de baño y el familiar que la atendía era incapaz de levantarla. Los policías auxiliaron a la mujer y la trasladaron a la habitación de la vivienda. La octogenaria les explicó que no había sufrido ningún tipo de lesión y rehusó recibir asistencia médica.