Comienza la cuenta atrás para la celebración del Arde Lucus (23, 24 y 25 de junio), la fiesta que evoca el pasado romano de Lugo y que estrena su título como Fiesta de Interés Turístico Internacional, y lo hace con la celebración de un Natalicio cuyo hilo conductor será la música de Abraham Cupeiro.
La obra de este músico natural de la localidad lucense de Sarria se caracteriza por la recuperación de instrumentos perdidos en el tiempo para utilizarlos en la creación de nuevas sonoridades e introducirlos en piezas musicales hasta ahora ajenas a ellos.
Los actos previos a la celebración del Arde Lucus comienzan este sábado en la Praza de Santa María, con la XXII edición del Natalicio, que se celebra en la Praza de Santa María, en pleno centro del casco histórico de la ciudad.
En este acto, en cuya representación participan nueve asociaciones de recreación histórica, se rememora la orden del emperador Octavio Augusto para construir las ciudades de Lucus Augusti, Bracara Augusta (Braga) y Asturica Augusta (Astorga), hermanadas desde 1986.
Además de la narración histórica, se realizará la tradicional ofrenda a los dioses y el desfile de tropas hasta A Mosqueira -la zona de la Muralla donde todavía puede verse el segundo nivel en altura de la estructura defensiva de la ciudad". Como novedad, también serán representadas tres obras de teatro.
La música de Abraham Cupeiro será el hilo conductor de todo el relato, en el que también se escuchará el "himno Calendis, de José María Núñez, interpretado por el Orfeón Xoán Montes y la Coral Ecos do Miño".
Durante la presentación del Natalicio, la alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, agradeció al tejido asociativo de la ciudad "su implicación, por trabajar los 365 días del año para que las fiestas guarden la mayor precisión histórica posible".