Los museos lucenses abrieron sus puertas el pasado 1 de junio. Desde aquellas, los protocolos de seguridad y la bajada de afluencia de los visitante, sobre todo de turistas extranjeros, son los grandes protagonistas que marcan este nuevo escenario.
La crisis sanitaria provocó que mucha gente se echase atrás para visitar las grandes salas museísticas que acoge la ciudad lucense, pero todavía quedan unos pocos que no temen al virus y se atreven a asistir a los museos.
"No llegamos a las cifras de años anteriores, pero nos vamos recuperando poco a poco en una situación complicada", asegura el encargado del Museo Universitario A Domus do Mitreo, Jesús Varela. "Durante la semana hay bastante gente, dentro del aforo permitido", comenta.
El Museo Interactivo da Historia de Lugo, así como el resto de centros museísticos lucenses, están en la misma línea. Hay asistencia de turistas, pero es incomparable con respecto a otros años.
Tanto los trabajadores, como las exposiciones, evolucionan positivamente y cumpliendo las normas sanitarias
PROCEDENCIA. Además, resaltan que la mayor parte de los visitantes de los museos son del norte de España, poniendo en manifiesto la nostalgia hacia los turistas extranjeros y la poca presencia de lucenses en las salas, que pierden la oportunidad de disfrutar de las exposiciones.
A pesar de ello, los museos de Lugo supieron adaptarse con rapidez a este nuevo marco social. Tanto los trabajadores, como las exposiciones, evolucionan positivamente y cumpliendo las normas sanitarias.
Así, el Centro de Interpretación da Muralla, para poder continuar con su actividad, tuvo que retirar las pantallas interactivas y las sillas con las que el público se acomodaba para poder disfrutar de los vídeos que exponían, manteniendo estos últimos.
"Lo hacemos para proteger al público. Es una visita cortita que con estas medidas se aguanta y se lleva bien", asegura la sala.
Todas las salas museísticas de Lugo se rigen por unas normas sanitarias que deben cumplir
En el Museo Provincial aseguran que tienen las puertas abiertas, "pero sempre cumprindo as normas de concordo a prol da saúde colectiva de forma estrita e readaptándonos aos efectos da covid-19 na xestión museística".
La sala de exposiciones Porta Miñá y el centro arqueológico de San Roque resaltan la buena organización que tienen al tener un aforo controlado y un público que cumplen en todo momento las indicaciones.
MEDIDAS SANITARIAS. Todas las salas museísticas de Lugo se rigen por unas normas sanitarias que deben cumplir. Entre ellas, destaca la limitación del aforo para evitar aglomeraciones, el uso obligatorio de mascarilla y la utilización del gel hidroalcóholico que disponen las salas.
Asimismo, se debe mantener la distancia de seguridad y seguir los rotulados que tienen los museos para que los visitantes no se crucen entre ellos.
Por último, no se precisa cita previa, excepto en el Museo Provincial, donde existe un protocolo sanitario que se rige por varias medidas a las que los visitantes se tienen que someter.
Así, en este centro cultural dependiente de la Diputación Provincial se ha implantado para acceder a su interior un control de temperatura y desinfección de manos y calzado, con una alfombrilla especializada en este último. Además, las salas de exposición tienen un aforo limitado y también está rotulada la entrada al museo por la puerta principal y la salida por una puerta lateral con el fin de evitar el cruce y contacto entre los visitantes.
