El pasado día 16, como en los demás institutos gallegos, comenzaban las clases en secundaria, bachillerato y algunos ciclos formativos en el IES Muralla Romana de la capital lucense. Sin embargo, hasta este lunes no se completó la vuelta a clase. Alumnos de Administración e Informática se incorporaron una vez que se pudieron equipar sus aulas, tras finalizar las obras en el interior del centro docente.
Los trabajos continúan. Ahora falta por concluir el aislamiento de las fachadas, el cambio de la caldera por dos que emplearán biomasa como combustible y la construcción de un silo para el suministro de este material.
Desde la dirección del instituto se asegura, tras las quejas de algunos progenitores, que las zonas en obras no entrañan ningún riesgo para los alumnos, ya que están debidamente valladas.
El IES Muralla Romana, que se encuentra en el barrio de A Piringalla, cuenta con casi un millar de alumnos y abrió sus puertas hace 34 años.
Las obras que se están ejecutando desde mediados del pasado mes de junio suponen una inversión de casi 834.000 euros. Contemplan la mejora del sistema de aislamiento térmico de la envolvente del edificio y la renovación de todas las ventanas, las cajas de las persianas y las canalizaciones de aguas pluviales.
Además, se sustituirán las luminarias existentes por LED y se instalarán reguladores de luz y detectores de presencia en pasillos y zonas comunes.
