Multado con 180 euros por llamar prostituta a su mujer durante una discusión en Lugo

El hombre alegaba que solo fue una riña "acalorada"
La Audiencia Provincial de Lugo, donde se confirmó el fallo. AEP
photo_camera La Audiencia Provincial de Lugo ratificó la sentencia.

Llamar a su mujer prostituta en una riña familiar un día de Fin de Año le costó a un lucense una multa de 180 euros como autor de un delito de injurias. El hombre recurrió la condena del juzgado de Instrucción ante la Audiencia Provincial de Lugo, alegando que fue una simple discusión "acalorada" entre el matrimonio, pero el tribunal entiende que le dirigió "manifestaciones claramente vejatorias", por lo que confirma la condena, que ya es firme.

El juez consideró probado que el 31 de diciembre de 2018, el acusado discutió con su esposa y "le dio un trato vejatorio, tratándola de prostituta". El hombre, según quedó recogido en el fallo, ya había tenido esa conducta en otras ocasiones previas.

El acusado recurrió la condena ante la Audiencia Provincial, alegando que las posibles expresiones ofensivas fueron proferidas en el ámbito de una discusión "acalorada" entre ambos. El letrado de la defensa expuso, además, que podrían tratarse de una injuria leve, pero "no podría ser incardinable en el ámbito de la violencia de género, pues no existe una situación de superioridad del varón denunciado respecto de la mujer denunciante".

AGRESIÓN. Sin embargo, el tribunal no comparte los argumentos del abogado de la defensa y ratifica la decisión del órgano instructor con el siguiente argumento: "el desvalor que se genera con la actuación del varón merece el reproche que el legislador consideró oportuno otorgar a las situaciones como la presente, en las que un varón resulta considerado como agresor, físico o psicológico, a su pareja, en este caso a su esposa. Por ello, y aun reconociendo los esfuerzos argumentativos del recurrente, lo cierto es que la resolución que se impugna ha de verse raticada", alega.

De este modo, la sala provincial considera apropiada la sentencia dictada por el juzgado de Instrucción, que condena al hombre -como autor de un delito leve de injurias- a la pena de multa de un mes a razón de 6 euros diarios, lo que suma un total de 180 euros. De este modo, la sentencia ya es firme y los insultos del acusado hacia su esposa en el transcurso de lo que él calificó como "discusión acalorada" no quedaron en nada, sino que fueron castigados penalmente con una condena de multa.