Un motorista que sufrió un accidente de circulación en Lugo el pasado 17 de julio ha sido denunciado por un delito contra la seguridad vial tras haberse demostrado que había consumido alcohol y drogas, concretamente, cocaína y cannabis.
El accidente se registró en la confluencia de la Rúa Vilalba y la Praza de Xaquín Lorenzo 'Xocas'. El conductor del ciclomotor perdió el equilibrio y cayó al suelo. Un equipo de atestados de la Policía Local acudió al lugar y, al ver que el motorista estaba herido, solicitó asistencia de una ambulancia para su traslado al Hula.
Los agentes detectaron que el hombre presentaba signos de embriaguez, por lo que solicitaron mandamiento judicial para realizar los análisis de sangre pertinentes. El resultado de los mismos desveló una tasa de alcohol en sangre de 1,32 y presencia de cocaína y cannabis.
Por este motivo, la Policía Local ha puesto el caso en conocimiento del juzgado de guardia para que instruya diligencias por un delito contra la seguridad vial.
DOS POSITIVOS MÁS. En la madrugada de este miércoles, efectivos del operativo nocturno de la Policía Local establecieron varios controles en vías urbanas y detectaron dos conductores con tasas positivas en las pruebas de alcoholemia realizadas.
El primero fue detectado a las 1.40 horas en la Ronda da Muralla, con un resultado de 0,60. Se le abrió expediente sancionador, con multa de 1.000 euros y retirada de seis puntos del permiso de conducir.
El segundo fue interceptado a las 3.45 horas en la avenida de Ramón Ferreiro, con una tasa de alcoholemia de 0,41. Fue propuesto para sanción de 500 euros y retirada de cuatro puntos.
RUIDOS. También en la madrugada del miércoles, el grupo nocturno de la Policía Local acudió sobre las 2.45 horas a un inmueble de la Rúa Xosé Novo Freire porque los vecinos se quejaban de los ruidos procedentes de una vivienda.
Al llegar, los agentes pudieron comprobar que desde el exterior de la vivienda y en las zonas comunes del edificio se escuchaba música con volumen elevado y voces de personas en actitud festiva.
Los policías consideraron que el ruido era incompatible con el descanso de los vecinos, por lo que identificaron al responsable y formularon denuncia por infracción a la ordenanza de protección ambiental.
