Un mercado para estimular los sentidos

La quinta edición de Gastroarte, la feria de artesanía y gastronomía puesta en marcha por el Ayuntamiento, cuenta en esta cita

Licores Os Maios. SEBAS SENANDE
photo_camera Licores Os Maios. SEBAS SENANDE

Pasear por Gastroarte es una de las mayores tentaciones que ofrecen cada año las fiestas patronales lucenses. Situada en la calle Puro Cora y pegada al Parque de Rosalía, la feria artesanal y gastronómica que impulsa el Ayuntamiento de Lugo reune este año a 20 participantes, la gran mayoría de la comunidad, y una amplia gama de productos para todos los gustos y colores. Es el quinto año consecutivo que se instala este mercado, una cita que pretende recuperar el ambiente de la feria tradicional y que recibe cada día una gran afluencia de vecinos.

El abanico de productos es amplio. Hay puestos de productos clásicos, como es el caso de Embutidos Suarna, venidos desde Os Ancares, donde se puede encontrar (y degustar) cecina, chorizo, jamón o androlla.

También hay puestos en los que la palabra Gastroarte adquiere su máximo significado, como el de Licores Os Maios, dos amigas de Ourense que elaboran bebidas espirituosas puramente artesanales a través de recetas antiguas pero que también venden pulseras, anillos y collares fabricados por ellas mismas. "Es una feria de gastronomía y artesanía, ¿no?", aseguran entre risas.

Del mismo estilo es el puesto de Licores Celsa y Alfarería Agulla. El matrimonio que lo regenta se reparte las tareas de uno de los stands más amplios de la feria. Él se dedica a la elaboración de jarras, recipientes de barro para beber o para adornar, con la leyenda y el año del San Froilán. Ella ofrece licores y cremas de piña, fresa, tarta de almendra, chocolate con cerezas, hierbas y orujo. Vienen de Vilaboa do Morrazo (Pontevedra) y ya son más de tres décadas siendo fieles a su cita con las patronales lucenses.

Pero no solo han venido productores y artesanos gallegos. La marca Producto Balear ha instalado un puesto por segundo año consecutivo en el que ofrece sobrasada con Denominación de Origen, camaiot, botifarrons, patés de diferentes sabores y elaboraciones artesanales y quesos típicos de Menorca. Además dan a probar Gin Xoriguer, una ginebra destilada tradicional en las Islas Baleares y con un marcado aroma a hierbas.

Entre lo puramente artesanal destaca, como cada año, el puesto de artesanía precolombina con sus mesas repletas de orfebrería del Museo del Oro de Bogotá que tanto llaman la atención de los visitantes. No podía faltar E.Ferro, otro de los puestos que acumula tres décadas de fidelidad al San Froilán. Sus zuecos, de colores, son ya una tradición de las patronales.

Es un paseo, el de la calle Puro Cora, que estos días estimula todos los sentidos. Queixería Prestes, Artesás de Noces o Caurelor son algunos de los puestos que abren el apetito. Pitiflús, Hypatia, Santín Cuero, Myruam Zuazúa o Varo Caride sorprenden con su talento en la fabricación y el cuidado en el acabado final. Un centro comercial, pero de los de antes.

Comentarios